CREAR TEMA

Para un club con un proyecto serio las inferiores deberían ser EL área a trabajar. Holan estuvo a punto de traer a Cueva sin cupo (avalando lo que hubiera sido la locura económica más grande de nuestra historia) y dejar sin contrato a Bacchia que venía del mundial de su categoría, lo que implicaba que se hubiera ido gratis a cualquier lado porque a nuestro DT se le ocurrió traer al peruano. No me meto en si Bacchia es bueno, malo o regular, sino en la lógica de administración dañina (muuuuuy dañina) que aplicó Holan post sudamericana.

Cero bola a las inferiores, jugadores a precios y con contratos que Independiente jamás debió pagar, sobrepoblación insólita en los extremos, media de edad alta en las contrataciones, jugadores en baja forma, decisiones insólitas (Britez titular por ej por sobre Bustos o Figal), nivel del equipo lamentable, no logró terminar entre los que clasifican a la copa (ni hablar de pelear o ganar el torneo) y la última vez casi que ni entra a la Sudamericana. Un año y medio muy malo, con una Libertadores en la que hicimos una primera ronda de mierda y en donde pasamos de culo gracias a la pechada de los colombianos contra Lara y 8vos de final contra un Santos que daba pena al que no le pudimos hacer un gol. Robados contra River después, pero también superados por ellos. Si no recuerdo mal tiene récord negativo contra todos los grandes salvo Racing...y ni hablar del caso Belluschi que por suerte no ocurrió. Cambios inexplicables, justificaciones que lo mostraban más preocupado por lavar su imagen que por otra cosa. Muchas cosas muy mal.

Si a pesar de eso creen que el tipo puede repetir lo de su primera etapa, que aprendió de sus errores o que todo lo anterior no fue tan malo está bien, acá nadie tiene la bola de cristal para saber cómo le va a ir a nadie, pero basta de la pavada de casi rendirle pleitesía o dejar de lado todo lo que la pasó en su último año y medio. Y también podemos aflojar con lo de "las dos copas". Mucho mérito con la Sudamericana, pero la otra fue un Sugura Bank contra un equipo japonés de mitad de tabla que no le importa a nadie.