CREAR TEMA

SOBRE EL AUSENTISMO DOCENTE EN LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES…

Nuevamente, como todos los años, mientras se discute la paritaria (aunque durante todo el año continúase mencionando), el gobierno provincial embarra la cancha haciendo alusión al Gran ausentismo de los docentes… Y obviamente este discurso es comprado, agrandado y aplaudido no solo por los medios periodísticos sino por todos aquellos que ven demonios en el movimiento gremial docente…
El gobierno reporta un “Ausentismo docente del 17%” (y aquí hay que aclarar que hablamos del actual pero en mayor o menor medida todos lo vienen diciendo desde por lo menos 1991, además de las chicanas habituales desde los máximos gobernantes acerca de las fantasiosas excesivas vacaciones), y lo pone en comparación con el 4,5 % promedio de las otras actividades laborales no docentes…
Por otro lado agrega que ese 17 % de ausentes debe ser cubierto con suplentes, lo cual eleva el presupuesto salarial en ese mismo porcentaje…
Y aquí es donde está la trampa/mentira…
El análisis que sigue tiene vericuetos estadísticos y porcentuales que pueden resultar engorrosos, pero que son justamente los que nunca se explican (y llamativamente tampoco lo hacen los sindicatos a la hora de desmentir las acusaciones), por lo cual es necesario explicitarlos.
Ese número del 4,5% de ausentismo general está integrado mayoritariamente por las que se llaman Licencias Ordinarias, aquellas a las que tiene derecho todo trabajador por las causales comunes, que no vamos a detallar aquí. Dentro de estas hay una que cobra especial relevancia para el cálculo, que es la de pré-parto y post-parto. En el ámbito general las mujeres tienen una vida laboral activa máxima promedio de 40 años, desde los 20 hasta los 60, y dentro de ella los embarazos se producen mayoritariamente entre los 20 y los 40 años, o sea dentro del 50% del tiempo laboral. A su vez las mujeres son el 50% de la población y por lo tanto ese porcentaje se mantiene entre los y las trabajadoras en general. En la docencia oficial provincial la vida laboral activa promedio es de 30 años, entre los 20 y los 50, por lo cual los embarazos se producen dentro del 66% de la vida laboral, pero además las mujeres son el 80% de los trabajadores de la educación. Teniendo en cuenta que la licencia es de 135 días, y que las estadísticas marcan que el promedio de hijos es de 1,2 por madre, vemos que la incidencia de esta licencia suma un 1% más, con sueldo.
Esto ya eleva el porcentaje de ausentismo por licencias ordinarias al 5,5%, que es el que se dice suele haber en las escuelas de gestión privada. No obstante también varias colegas toman una licencia extra, pero sin goce de sueldo, que según los cálculos anteriores alcanza el 0,5%.
Llegado este punto es necesario hacer mención a las licencias extraordinarias por estudio y perfeccionamiento docente, que suman otro 0,5% y de las cuales solo la mitad son con goce de sueldo, ya que para tener este beneficio es necesario cumplir ciertos requisitos. Es de hacer notar que en la actividad no docente la capacitación y perfeccionamiento no es tomada por el empleador como licencia, sino como parte del trabajo y por lo tanto no se registra como ausencia aunque efectivamente no se esté en el puesto de trabajo habitual.
Viene ahora el ítem más relevante de este cálculo y es el que todos los “informadores” omiten, seguramente por desconocimiento y desidia en averiguar…
En el Sistema Educativo Oficial en general, y en la provincia de Buenos Aires en particular, la carrera docente comienza siempre desde el primer escalón, el cargo de base (Maestro, profesor, ayudante de cátedra, preceptor, bibliotecario, encargado de medios o de laboratorio, etc.). El ascenso a otras funciones, o desempeño de cargos jerárquicos, Siempre es por Concurso, ya sea solo de antecedentes (en el menor de los casos) o de antecedentes y oposición (todos los cargos de conducción institucional y supervisores). Esto quiere decir que uno parte de un cargo de base y sobre ese cargo asciende. Cuando el ascenso es en carácter de titular uno deja el cargo de base y pasa a ser titular del cargo jerárquico.
En la provincia los cargos jerárquicos de todo tipo representan el 15% del total (inspectores, directores, vicedirectores, secretarios, regentes, jefes de área, jefes de preceptores, jefes de medios de apoyo técnico pedagógico).
Más allá de contingencias políticas por las cuales no siempre se realizan a tiempo los concursos de ascenso titulares, el Estatuto de Docente establece que solo se titulariza la mitad de los cargos existentes, para darle movilidad al sistema. Eso significa que por lo menos el 7,5% de los cargos docentes está ocupado por personal jerárquico provisional. Esto significa que ese personal tiene un cargo de base (que no desempeña NI COBRA) y tiene asignadas las funciones jerárquicas transitorias. En la estadística de “ausentismo” se cuenta ese 7,5% como Ausente, cuando en realidad eso es solo una cuestión estadística. La persona está cumpliendo funciones en otro cargo, transitoriamente, y solo cobra ese cargo jerárquico. En el cargo de base tiene un suplente. Asimismo, varios colegas que ejercen funciones jerárquicas transitorias deben o necesitan solicitar licencia en otros cargos u horas porque se les superpone con el cargo jerárquico. Esas licencias son obviamente SIN SUELDO, y representan el 1%.
Hasta aquí entonces hemos contabilizado un 15% de personas que por uno u otro motivo no deempeñan el cargo asignado, de los cuales sólo el 5,75% son con goce de sueldo.
Si tenemos en cuenta la cantidad de colegas que padecen las llamadas Enfermedades profesionales (principalmente referidas al mal uso funcional de la voz, por exceso reiterado de uso y cantidad de horas semanales de trabajo), nuestro porcentaje se acerca un poco más al mentado 17%.
Entonces… si hay un supuesto abuso… a qué porcentaje asciende ese abuso…
Y si así fuere…las licencias que deben ser cubiertas con suplentes solo sumarían el 7% del total.
Bastante diferente a lo que quieren hacer creer, no les parece?