CREAR TEMA

Como dice mi suegro, pase lo que pase, gobierne quien gobierne, nosotros todos los días tenemos que levantarnos para trabajar. El trabajador puede estar mejor o peor de acuerdo a lo que le rinde el sueldo, pero no se puede prescindir del trabajador, porque sin trabajadores no hay economía. Por eso yo siempre voy a estar a favor de las políticas económicas que premien a los trabajadores, que busquen distribuir la riqueza más a favor de aquellos que la generan. En definitiva, el trabajador mantiene tanto al pobre que percibe un plan social como al rico que vive de rentas.

Milei tiene sus convicciones y es admirable cómo las defiende, pero las fórmulas mágicas no existen y lo que funciona en un país no siempre es aplicable en otro país debido a diversos factores culturales. Está claro que ninguna economía va a funcionar si siempre se gasta más que lo que se produce, y tarde o temprano los ajustes son inevitables. Pero la filosofía libertaria parece enfocarse solamente en la libertad individual, sin tener en cuenta que el contexto también hace a la vida de cada uno. Entonces es muy lindo pensar en una vida sin impuestos, donde cada uno tenga plena libertad de usar su dinero para lo que quiera, pero esa libertad siempre va a estar limitada por el contexto. Por eso los impuestos existen para que el contexto pueda ser tolerable, y esto es necesario aun para el tipo que no tiene ni una pizca de conciencia social. Después estará el justo planteo de que los impuestos se malgastan y no se usan como se deben, pero entonces hay que buscar la manera de que los impuestos sean aprovechados eficientemente, y no caer en la ideología del sálvese quien pueda. En toda sociedad hay fuertes y débiles; y las sociedades son más exitosas cuando los fuertes ayudan a fortalecer a los débiles, no cuando los pisan.