la ilusión de ganar y llevar a nuestra vitrina, la única copa que nos faltaba La Supercopa.
Se jugó en Avellaneda, partido revancha, la ida se había perdido en un partido atípico, cancha totalmente embarrada, no se podía jugar, fué 1 a 0 para el santos con gol contra del morrón Rotchen y llegaba la vuelta y habia que hacer 2, pero el rojo que venía de ser campeón.......
Ni siquiera pude vivir esa época, miro toda la falopa que somos desde el 2000 y me pongo re mal, mi viejo me cuenta cosas imposibles con nuestro presente, volvé Rojo!
Ni siquiera pude vivir esa época, miro toda la falopa que somos desde el 2000 y me pongo re mal, mi viejo me cuenta cosas imposibles con nuestro presente, volvé Rojo!
Yo ni siquiera el del 2002, lo único que vi fue la Sudamericana mas falopa de la historia, con uno de nuestros peores equipos de la historia.
Ni siquiera pude vivir esa época, miro toda la falopa que somos desde el 2000 y me pongo re mal, mi viejo me cuenta cosas imposibles con nuestro presente, volvé Rojo!
Yo ni siquiera el del 2002, lo único que vi fue la Sudamericana mas falopa de la historia, con uno de nuestros peores equipos de la historia.
encima esa copa fue una de las culpables del descenso, ya que descuidamos el torneo y le dimos importancia a la recopa suruga y libertadores, una mierda, el torneo del 2002 fue lo último safable de Independiente
Lo dije antes y lo repito. La doble visera será todo lo que quieran comparada con la cancha actual pero me parece hermoso la gente tan cerca. Hacen el gol y lo festejan AHÍ, en tu cara. Tremendo. Para el jugador imagino que también.
El último gran equipo genuino que tuvimos -el de 2002 era equipazo también pero todo medio raro los manejos-.
Es tristísimo, hace 22 años que no tenemos un equipo de ese nivel, 22 años, qué mal se hicieron las cosas por favor, qué manera de dilapidar la gloria,
En la ida de la final estaba en el gimnasio de la sede con la radio, y la vuelta en la cancha viendo en vivo el globazo de pascualito al mono navarro centoya.
Cuando entra la bocha se midieron 8.4 en la escala de Richter en toda Avellaneda. Epicentro, la recordada doble visera.
En la ida de la final estaba en el gimnasio de la sede con la radio, y la vuelta en la cancha viendo en vivo el globazo de pascualito al mono navarro centoya.
Cuando entra la bocha se midieron 8.4 en la escala de Richter en toda Avellaneda. Epicentro, la recordada doble visera.
Lo vi por tele, era chiquito, 11 años, me senté a ver el partido y no sabía que iban a venir los peores años. Pero ese equipo me hizo soñar.