Connect with us

Abal, el mejor refuerzo

abal1

Hauche, Bieler, Licht… no, la mejor incorporación para Racing fue el juez del encuentro, quien con una vergonzosa actuación propició la victoria 2-1 de los de Claudio Vivas sobre Independiente. Igualmente, los de Américo Gallego se la rebuscaron para mantenerlos asustados hasta el último minuto. Ya van dos clásicos que los definen los hombres de negro…

Hasta que Diego Abal decidió hacerse protagonista de la noche, el choque fue parejo. Racing, con Lucas Castromán moviéndose por todo el frente de ataque, incomodó a la última línea roja, mientras que los de Américo Gallego, desde los pies de un encendido e imprevisible Ignacio Piatti, generaron lo mejor.

La primera de riesgo la tuvo al toque del inicio Andrés Silvera, quien remató desde lejos picándola y el balón se fue por encima del travesaño. Pero a los 18, el árbitro comenzó a hacer de las suyas e inclinó la balanza para el lado de Racing: Matheu perdió la pelota con Claudio Bieler, quien, de espaldas, le propinó un codazo al capitán rojo. El defensor devolvió el golpe y Abal expulsó sólo al jugador de Independiente.

A los pocos minutos, Racing, con el hombre de más, comenzó a tocar y en una acción que arrancó con Bieler adelantado tocando para un costado, los de Vivas lograron ponerse en ventaja. Adrián Lucero remató, la pelota rebotó en el cuerpo de Adrián Gabbarini y Bieler capturó el balón para anotar el 1-0.

Independiente no se amilanó y pese a la desventaja numérica (12 vs. 10) logró emparejar el trámite, mas no el marcador, ya que en la única que tuvo, un cabezazo de Darío Gandín tras un centro de Walter Acevedo, la pelota no quiso entrar y se fue apenas rozando el palo izquierdo del arco de De Olivera.

Y sobre el cierre, tras una buena acción de pelota parada, Racing puso el 2-0 por medio de un cabezazo de Matías Cahais. Y el Rojo no tuvo suerte, ya que en la última, Piatti disparó de lejos y la pelota, tras rebotar en De Olivera, se fue afuera.

En el segundo tiempo el Rojo hizo lo que pudo (que no fue mucho) y Racing casi aumenta la ventaja un par de veces, primero con el ingresado Gabriel Hauche y luego con Bieler, pero en ambas acciones los delanteros le erraron al arco. Y faltando poquito, Federico González, con un gran remate lejano, marcó el descuento, minutos después de que Abal no cobrara un claro penal de Cahais sobre Silvera (lo sacó sin ninguna intención de jugar la pelota).

Y el Rojo fue con lo que le quedaba en busca del empate. Núñez obligó a De Olivera con un disparo de larga distancia y en una acción desprolija dentro del área la defensa de Racing despejó. Y después otra vez apareció Abal para expulsarlo a Núñez, quien pegó de atrás, es cierto, pero no muy distinto a lo que hizo toda la noche Licht, quien increíblemente terminó los 90 minutos. ¿Y el codazo a Vella? En la tele ni lo repitieron…

Tenía que ser así, no había otra manera. Racing festejó con una camiseta roja enfrente gracias a una mano negra que lo favoreció toda la noche, igual que en Salta, cuando le anularon muy mal un gol a Gandín. No importa, como dijo el Tolo, nos vemos en la sexta fecha…

Foto gentileza diario Clarín

Advertisement
Connect