Independiente se prepara para el regreso a la competencia luego de un largo receso y un intenso mercado de pases. Enfrentará a un equipo de menor categoría que jugará el partido más importante de su historia. Por eso resulta importante analizar cómo lo enfrentará el rojo.
En principio, a diferencia del semestre anterior, se puede vislumbrar que las intenciones tácticas giran en torno a romper el doble cinco habitual por tres jugadores en el medio, equilibrando marca y traslado, y mutando más hacia un 4-3-3 clásico.
Por lo tanto, teniendo en cuenta los amistosos disputados ante Riestra y la UAI, el tridente de volantes centrales estaría formado por Fernando Gaibor, quien viene jugando entre los titulares, acompañado de los refuerzos Pablo Hernández y Francisco Silva. La opción de ganar en marca y recupero se compensa con Nicolás Domingo, que por ahora viene jugando en los mix de suplentes junto a Carlos Benavídez.
En cuanto al tridente delantero, por ahora Silvio Romero le viene ganando la pulseada a Emanuel Gigliotti, convirtiendo en ambos amistosos. Los que reciban con terreno por delante en ambos laterales serán casi seguro Martín Benítez y el mundialista Maximiliano Meza, ambos con capacidades más que sobradas de cerrarse y arrancar detrás de la jugada cuando se requiera.
Pensando puntualmente en el rival, la gran posibilidad es que Independiente requiera generación de juego ante un probable corte de juego sistemático de juego de parte de Ballester; con lo cual futbolistas de buen pie y buen traslado parecen ser la mejor opción en el arranque.
