Con la sanción a Paolo Guerrero aún candente y a horas de afrontar el partido de vuelta de la final de la Copa Sudamericana ante Independiente, el plantel de Flamengo fue sometido a un control antidoping sorpresa.
Salvo los jugadores lesionados y fuera de la convocatoria, el resto de Flamengo fue obligado a entregar muestras para controles a los representantes de la Conmebol, quienes sorprendieron al equipo en las instalaciones de entrenamiento, Nido del Urubú, que poseen en Río de Janeiro.
Próximamente, se presume que Independiente deberá cumplir con el mismo procedimiento. Ya había sucedido algo similar en la final de la Copa Libertadores, también entre un equipo brasileño y uno argentino; Gremio y Lanús, en este caso. (Vía TyC Sports)
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