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Ni tanto ni tan poco

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Seamos realistas: ni la actuación ante Racing nos convertía en el nuevo Manchester de Avellaneda y mostraba que en realidad todas las pálidas del semestre pasado fueron casualidad ni este empate ante River hace que el “Rojo” sea un desastre y que no esté para pelear nada.

Es indudable que el cansancio jugó un papel preponderante en el encuentro de este martes e hizo mella en los jugadores en el complemento, luego de un más que aceptable primer tiempo que dejó varias cosas interesantes de cara al futuro.

Analizando desde atrás para adelante, por fin Hilario Navarro pudo debutar en Independiente y lo hizo bien, aunque dejó un sabor agridulce. Estuvo siempre bien parado y tapó un par de buenas pelotas, aunque su error en el gol de River y la falta de agilidad que mostró por momentos son ítems que mancharon un poco su debut. Igual, aprobado para el arquero que venía de una larga inactividad.

Atrás, Mariano Viola, ya recompuesto de su flojo estreno en Primera frente a San Lorenzo, y Emmanuel Bocchino, quien tampoco tuvo un gran bautismo en el primer equipo ante Arsenal, van mejorando y pueden ser buenas alternativas de cara al futuro inmediato.

En el medio, Sergio Vittor volvió a mostrar si fiereza y, si bien aún no está para ser el patrón absoluto del mediocampo, tranquilamente puede serlo más adelante. Condiciones tiene.

Y si hay uno que está capitalizando al máximo los minutos en el verano, ése es Federico Higuaín. “Pipita”, quien casi nopartició en el pasado campeonato, la está rompiendo: juega, hace jugar, tira magia, corre todas, llega a posición de gol… lástima que en el segundo tiempo se apagó.

Ante la falta de de un refuerzo de peso en la línea ofensiva, otro que está aprovechando al máximo para mostrarse es Darío Gandín, quien estuvo intermitente pero peligroso, y propició el primer gol del partido con un potente remate que se estrelló en el travesaño.

Pero ojo, no todas fueron buenas: la espalda de Lucas Mareque sigue siendo el flanco predilecto de los rivales para atacar, Emanuel Centurión volvió a demostrar que su estadía en Avellaneda tiene pocos (por no decir nulos) fundamentos, el mal momento de Sosa parece no tener fin y la incógnita de quién es y cómo juega Leandro Depetris sigue a flor de piel. ¿Sus condiciones no dan para que juegue siquiera unos minutos en el Torneo de Verano?

Como lo dijo Santoro tras el partido, lo importante arranca el 8 de febrero, cuando el “Rojo” reciba a Vélez vaya a saber uno dónde. Ahora, sólo es tiempo de probar y ajustar piezas para llegar de la mejor manera a esa fecha.

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