Andrés Silvera fue pura efectividad en el Libertadores de América y anotó tres goles para que Independiente venciera por 3-1 al duro Atlético Tucumán, que dio batalla en el primer tiempo. Fabio Escobar, jugador que quería Américo Gallego, había marcado la paridad transitoria. Lucas Mareque la rompió.
Pese a la diferencia en el marcador, el partido fue más que complicado para el Rojo, sobre todo en los primeros 45 minutos. El Decano se plantó bien atrás e hizo imposible la creación de juego para un Independiente que, además del problema que planteó su rival, parecía no estar en su noche.
Sin espacios ni posibilidad de llegar con juego asociado, recién a los 21 y de pelota parada se produjo la primera emoción: centro de un corner que cruzó toda el área, Leonel Galeano quiso rematar al arco pero no le salió y el Cuqui, que estaba en el área, su hábitat, corrigió el camino del balón y lo mandó al fondo de la red.
Sin embargo, poco le duró la alegría a Independiente. Apenas cinco minutos después, Fabio Escobar, que en el primer tiempo fue una pesadilla para la línea de fondo del Rojo, conectó tras un desvío de cabeza de Deivis Barone en el área y puso el 1-1.
El equipo del Tolo, otra vez sin espacios y sin ideas, no encontró nunca el camino para siquiera volver a inquietar a Lucas Ischuk en la primera mitad y dejó una preocupante imagen de cara al complemento, ya que además se mostraba endeble en defensa.
Para el segundo tiempo Gallego mandó a la cancha a Patricio Rodríguez en lugar de Leandro Gracián, que poco pudo hacer ante la marca tucumana, y el cambio surtió efecto ya que Patito le dio otro aire al equipo y lo ayudó a abrir más la cancha recostado por la banda izquierda.
Así, a los 11 minutos, Luciano Vella desbordó por derecha, centró y el goleador Rojo se anticipó a la defensa de Atlético y, con un toque sutil, volvió a poner en ventaja a Independiente. Y no sería la última aparición del Cuqui en el partido…
Dos minutos después, entre Patito y Darío Gandín armaron una muy linda jugada que Silvera culminó con un cabezazo bien de ‘9’, entrando de arremetida y saltando en el medio de los dos marcadores centrales del equipo de Osvaldo Sosa.
Hasta el final, Independiente se dedicó a cuidar las piernas, a tocar el balón y hacerlo circular, más pensando en lo que se viene que en marcar otro tanto, algo que hubiera podido hacer si hubiese tenido algo más de fortuna en alguna de las otras chances que tuvo.
Y fue victoria para Independiente, que nuevamente no brilló (al menos en el primer tiempo), pero que otra vez fue más que su rival, hizo todo para llevarse los tres puntos y esta vez, merecidamente, los consiguió. Y ahora que se venga el líder…
No te pierdas…
Uno x uno vs. Atlético
Gallego: “Es un resultado merecido”
Mareque la descosió
Todo un éxito
Fue un cumpleaños feliz
Descanso para Acevedo
La otra tabla
Y cayó Vallés
