La venta de Darío Gandín al Necaxa está frenada, aunque los dirigentes de Independiente son optimistas en que se resolverá en las próximas horas. El tema es que al delantero no le cierran los números del contrato que le ofrecen y, además, reclama una deuda.
“Me deben sueldos, primas y quiero que me den el 15 por ciento del pase. Además, lo que me ofrecieron desde México no me cierra. Hoy está difícil”, confesó el Chipi a Tyc Sports, por lo que todavía no se puede afirmar que la venta está hecha.
La transferencia le dejaría a Independiente una suma cercana al millón y medio de dólares por la mitad del pase que tiene el club, aunque a esa suma se les deben descontar unos cuantos miles de pesos para pagarle a Colón, a quien se le debe dinero desde 2008, y a Atlético Rafael, que guarda otra parte del pase.
A Gandín lo esperan el lunes en Necaxa para hacerle la revisión médica y luego firmar los papeles, aunque desde el entorno del jugador comentan que, a menos de que cambien las cosas, el Chipi no viajaría mañana por la tarde noche a México.
