Adrián Gabbarini: Nada que hacer en el primero y el tercero, pero único responsable del segundo, el de Palermo, donde tuvo una muy mala salida.
Leonel Galeano: Individualmente no tuvo un mal partido, pero no ayudó al equipo siendo salida, claramente no podía hacerlo, es central.
Eduardo Tuzzio: Partido tranquilo para el zaguero que no sufrió ni con la velocidad de Gaitan ni con la altura de Palermo.
Julián Velázquez: Otro buen partido de la Avispa, mostrando temperamento y temple.
Lucas Mareque: La bandera de Independiente. Fue salida constantemente, era uno de los pocos a los que no le quemaba la pelota e incluso hizo una jugada barbara, arrancando de tres, terminando de volante por dercha, eludiendo a un rival y sirviendole el primero a Piatti. Enorme lo del capitán del Rojo.
Ignacio Piatti: Tuvo una de zurda y perdonó. En la segunda decretó el parcial 1-0 tras el jugadon de Mareque. Sin dudas el ingreso de Vallés lo benefició, pero ya estaba algo agotado.
Walter Acevedo: Estuvo algo impreciso y perdido en la marca, pero siempre intentó hacer jugar al equipo, aunque no siempre lo consiguió.
Federico Mancuello: Poca participación en el partido. Tuvo un par de desbordes picantes en el primer tiempo y no mucho más.
Leonel Núñez: Muchas ganas, corrió más de lo que jugó. La pidió siempre y terminó decorando el resultado de penal.
Darío Gandín: No le llegó mucho la pelota, pero tampoco hizo generar los espacios como para que le llegue, y las pocas que tuvo tomó malas decisiones.
Andrés Silvera: Poco también del Cuqui, que si bien en el primer tiempo, se sacrificó y corrió varias, en el complemento participó poco y nada del encuentro y la única que tuvo fue de zurda, que la desperdició pegandole muy despacio y haciendo fácil la resistencia de García.
Patricio Rodríguez: Entró de “doble Mancuello”, no pesó ni pudo cambiar las cosas.
Gabriel Vallés: Muchas ganas. Se proyectó con bastante intensidad y desbordó en varias. Debe ser titular.
Federico González: Otro que ingresó con muchas ganas y tuvo su chance de cabeza pero la desperdició.