Fabián Assmann: no cometió errores importantes, pero dio muchos rebotes en los remates lejanos que podrían haber costado un gol. Nada que hacer en el tanto de Franco Sosa.
Carlos Matheu: flojo partido del central devenido en marcador lateral. No estuvo acertado en la marca y no participó en ofensiva.
Leandro Gioda: la figura. Sacó todo lo que le tiraron, tanto por arriba como por abajo. Lástima que en el gol del empate un jugador de Racing lo anticipa en el cabezazo.
Guillermo Rodríguez: no ofreció seguridad. Perdió y ganó casi en igual medida con los jugadores rivales.
Federico Higuaín: muy impreciso, incómodo en una posición que no es la suya, se fue reemplazado en el entretiempo.
Damián Ledesma: pasó inadvertido. No cortó juego, no creó, nada de nada.
Lucas Pusineri: se extrañó al mediocampista emblema y alma del equipo. No pudo contagiar a sus compañeros y hacerles sentir la responsabilidad de jugar un clásico de tal magnitud con la camiseta de Independiente. Estuvo muy impreciso en los pases e intervino poco en el traslado y creación.
Lucas Mareque: tuvo ráfagas. Por momentos fue el único que intentó ir para adelante, pero se fue diluyendo.
Daniel Montenegro: el gol y nada más. Se necesita muchísimo más del “Rolfi”.
Leonel Núñez: casi no intervino del juego. No tuvo ni una chance de gol.
Darío Gandín: al igual que su compañero de ataque, pasó desapercibido.
Adrián Calello: entró para darle más marca y equilibrio al equipo pero no pudo.
Leonel Ríos: muy mal. No dio ni un pase a un compañero. Flojísimo.
Freddy Grisales: estuvo pocos minutos.
Por Walter Linovich
Fuente: InfiernoRojo.com
