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CREAR TEMA

Sábado 15/02/2020, 22:48:34
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Escrito por Uruguayo del Rojo

Escrito por juanascanio

Nunca tendria un perro que no fuese rescatado y mucho menos comprado.
LOS PERROS NO SE COMPRAN, SE ADOPTAN.
Yo pensaba lo mismo. Hasta que en casa trajeron un perro de un refugio que fue extremadamente maltratado.

Nunca nos pudimos adaptar al perro. Obviamente que en casa nos hicimos cargo de un perro que siempre fue agresivo. Pero no pasa por ser comprado o rescatado: hay perros que no se recuperan nunca mas.

Lamentablemente eso que cuentas es real, Hay animales que no se recuperan nunca mas y lo mejor es eliminarlos pues son un peligro.

Mi madre cometió ese error. Ella tenia varios perros, gatos y un loro, algunos regalados, otros recogidos en la calle. Todos vivían en armonía, con decirles que los gatos y perros jugaban con el loro. Nunca una pelea.

Un día, recogió a una perra de la calle. Estaba en un estado físico deplorable, casi moribunda. Psicológicamente su estado era pésimo también, era evidente que ese animal había pasado por muchas cosas y se había acostumbrado a ser un marginal. Era un animal extremadamente nervioso y agresivo. Le gruñía a todos, excepto a mi madre y los otros animales le tenían miedo.

La perra estaba tan mal físicamente que lo mejor era dormirle. Mi madre se negó rotundamente con su clásica de que la vida es sagrada, etc., etc.. En fin. La perra era tan agresiva que cuando salíamos la encerrábamos en un cuarto aparte.

Un día salimos y dejamos a la perra encerrada como siempre. Al regresar en la noche un vecino nos estaba esperando en la entrada y nos dijo "No se que carajos ha pasado en su casa, pero hemos oído unos horribles ruidos de animales peleando toda la tarde, estuvimos por llamar a la policía pero ahora todo esta quieto".

Entre a la casa con un madero en la mano y el alma en vilo. Sabia que algo malo había pasado, pero no imagine algo tan horrible. Peor que cualquier película de terror.

La sala, el comedor, la cocina eran una masacre. Sangre y tripas por todas partes. La perra se había escapado del cuarto y se había pasado la tarde cazando y matando a todos los otros animales. Ni por hambre, ni por defenderse; simplemente porque era un animal salvaje y solo sabia atacar y matar. Hasta al pobre loro, que llevaba décadas en la familia, lo destrozo. Solo se salvo un perro que era castrado y muy manso. Quizás eso lo salvo.

Por supuesto, quise matar inmediatamente a la perra, pero mi madre se opuso. No quiso escuchar cuando le dije que ese animal era un peligro publico, que si se escapaba a la calle podía atacar a alguien en la vecindad, o incluso desconocerla a mi madre y atacarla.

De nada sirvió, mi madre estaba obsesionada con salvar a esa perra. Quizás simplemente no quería perder autoridad ante su hijo reconociendo que la había embarrado. O quizás fue esa la primera manifestación de su demencia senil, y en ese momento no la supimos reconocer.

Quede tan cabreado con la ceguera de mi madre, que me largue de la casa, frustrado y preocupado por dejar a mi madre con esa bomba de tiempo.

Felizmente, la perra estaba tan enferma que a los pocos días igual murió.

Así, que todo bien con el rescate de animales, pero no me como el cuento de la redención ilimitada. Hay animales y personas que están mas alla de la recuperación y lo mejor para todos es hacerlos descansar de una vez.