Independiente sigue navegando en la irregularidad: tras un buen primer tiempo, el equipo de Claudio Borghi bajó su nivel en el segundo y terminó perdiendo por 1-0 ante Newell’s, con gol de Cristian Fabbiani. De esta manera, el “Rojo” además cedió su invicto de 16 partidos.
Es difícil descifrar a este Independiente. Pasa de picos de alto rendimiento a la intrascendencia pura tanto de partido a partido como dentro de los encuentros mismos, y así, sumido en esa irregularidad, es difícil que pueda dar pelea en un torneo donde nadie regala nada.
Sorprendió el planteo híper ofensivo que propuso Claudio Borghi desde el arranque. Para que ingresara Daniel Montenegro, y con Leonel Ríos afirmado entre los 11, se esperaba que el entrenador sacara a Hernán Fredes o a Darío Gandín, sin embargo pegó un volantazo de último momento y dejó afuera al defensor Juan Francisco Caracoche.
Por lo hecho en el primer tiempo, la apuesta del DT parecía salir bien. Aunque algo expuesto en defensa, Independiente daba la sensación de saber a qué jugaba y pudo haberse puesto en ventaja, pero desaprovechó todas las chances que tuvo y no logró quebrar a Sebastián Peratta. Y ojo, por momentos atrás la pasó mal.
En el complemento, como viene sucediendo en los últimos partidos, Independiente arrancó dormido y nuevamente lo pagó caro. Damián Ledesma trasladó de más la pelota, la perdió y a cobrar: rápida combinación ofensiva, desborde, centro y cabezazo de Fabbiani que, increíblemente a los cinco minutos, liquidó el partido. ¿Un gol liquidó el partido? Sí, por que Independiente no supo cómo administrar la desventaja.
El gol, tal como reconoció Borghi tras el partido, los mató. El “Rojo” no generó más fútbol en todo lo que quedó de juego y casi que no molestó al arquero local, quien se convirtió en un cómo espectador del partido. Es más, si no hubiera sido por Fabián Assmann, se hubiera perdido por más.
De esta manera se perdió el invicto de 16 partidos por torneo local que arrastraba Independiente desde la era de Pepé Santoro y la punta, en poder de San Lorenzo, ahora está a seis puntos. Será cuestión entonces de encontrar la regularidad para poder encausar de una vez por todas a este equipo que promete, pero hasta ahora, no cumple.
