Facundo Tello tuvo una noche para el olvido en el Independiente y Boca. El juez se equivocó para los dos lados y coronó con un show a falta de dos minutos de juego.
Independiente y Boca dejaron un partido para el recuerdo, en un duelo que tuvo todos los condimentos habidos y por haber, en un duelo que fue esperado con ansias y no falló, dejando un divertido 2-2 en el que francamente lo pudo ganar cualquiera. Pese a esto, además de por la lluvia, el partido se vio empañado por Facundo Tello.
El árbitro comenzó correcto, pero poco a poco se le fue la situación de las manos. Cobró un ingenuo penal de Lucas Rodríguez en el arranque, y minutos después obvio la expulsión de Juan Manuel Insaurralde que lo acomodó de un puñetazo a Villa, en una irresponsabilidad total por parte de un defensor de tal experiencia y al borde del área.
Para colmo, faltando un minuto para que termine el primer tiempo, Renzo Bacchia atenazó la pelota, pero le cabecearon las manos, el uruguayo pierde la misma y el juez no cobró nada, de esa continuidad y una sucesión llegó el 2-1 de Boca. Ya en el segundo tiempo, más precisamente a los 24 minutos, llegó la expulsión de Fabra quien vio la segunda amarilla de un Tello que se olvidó por completo que debía ver la roja, siendo notificado por el juez de línea.
Faltando algo menos de 20 minutos para la culminación del juego un diluvió insostenible se largó en el estadio, el cual si bien tiene las mejores utilidades en cuanto a drenaje no pudo soportar ese caudal en tan pocos minutos, lo cual fue poniendo minuto a minuto aún más impracticable el campo de juego. En ese caos llegó el empate de Alan Soñora, con un referí que estuvo lejísimos de pararlo.
Cuando quedaban dos minutos, si dos minutos, para que termine el partido y el Rojo iba con el empuje de sus hinchas, Tello paró el encuentro, con una pelota que no rodaba y lejos de hacer ir a los jugadores al vestuario se quedó parado en cancha, siendo captado el circo que armó su confusión y desdibujándose cada vez más su autoridad ante un irascible entorno.
Insólitamente tras un bochorno de 25 minutos se reanudó el juego, con dos minutos de tiempo por cumplir más cuatro de adicionado, allí se desarrolló el tramo final, donde el Rojo tuvo las más claras para ganarlo, pero no inquietó en demasía. El equipo se fue aplaudido con un claro entendimiento, dieron todo en un divertido partido y Facundo Tello opacó el espectáculo.
