Independiente perdió la chance de seguir con vida en la Copa Sudamericana. No pudo en los 180 minutos ante el Chapecoense y en los penales tampoco. Se acabó toda la ilusión. Un dolor muy grande. Una bronca inmensa porque otra vez el equipo no puede ganar un partido importante.
El partido arrancó con una aproximación del Chapecoense que hizo presagiar un equipo que quería llevarse por delante a Independiente. Sin embargo, lejos estuvo. Es más, fue el Rojo el que comenzó a contar con las chances para abrir el marcador por primera vez en la serie. La más clara estuvo en los pies de Emiliano Rigoni, tras una buena habilitación de Cristian Rodríguez.
Luego se sucedieron algunas aproximaciones del equipo de Gabriel Milito pero poco a poco el partido se fue apagando por varias razones. El Rojo no presionaba en ataque, Chapecoense cortaba con falta todas las salidas rápidas de su rival y ambos equipos comenzaron la batalla en la zona de volantes.
Así se fue la primera etapa. Si bien en el cierre hubo un tiro libre peligroso para los brasileños y en la contra Rigoni desbordó muy bien pero su pase hacia atrás fue interceptado, poco fue lo que hicieron los equipos. Claro está que quedó la sensación que el Rojo fue más que su rival, pero ambos se fueron sin goles.
En el complemento el partido fue aún más luchado. Ambos equipos contaron con chances para abrir el marcador. El que primero sacudió fue Independiente cuando Jorge Ortiz desde afuera remató y la pelota dio en el ángulo y se fue. Más tarde fue Rigoni el que, habilitado por Vera, definió muy mal ante la salida de Danilo.
Sin embargo, fue el local el que contó con las chances más claras para ganar el partido. Primero, tras un tiro de esquina, en el que la pelota picó en la línea y Campaña la pudo despejar en segunda instancia. Más tarde el que le dio dos veces al palo fue Kleber Santana. Primero tras un tiro libre y un error de Campaña y luego con un derechazo fortísimo.
Lo cierto es que ninguno pudo abrir el marcador y se fueron directo a los penales. Y ahí, Campaña y Danilo se lucieron, por su intuición y por lo mal que ejecutaron los penales los jugadores. Entre los brasileros erraron: Thiego, Kleber Santana y Gil. Enfrente, por Independiente los que no convirtieron fueron: Benítez, Rigoni, Sánchez Miño y Tagliafico.
El penal más doloroso fue el de Juan Sánchez Miño porque si convertía el que clasificaba era el Rojo, pero el ex Boca lo pateó muy débil y Danilo adivinó la intención. Luego, fue el turno de Tiaguinho cuyo remate fue alcanzado por Campaña pero no pudo desviarlo y con la diferencia de 5-4 fue Tagliafico el responsable de igualar, pero el arquero brasilero le adivinó la intención y se quedó con el pase a cuartos de final.
Independiente, una vez más, decepcionó a sus hinchas que día a día ven pasar las posibilidades de crecer y ganar algo por errores y carencias propias. ESTO NO DA PARA MAS.
Foto: Ole.com
