Los triunfos siempre traen viento de cola. Y hay que aprovechar cuando el equipo tiene un arranque auspicioso.
En estas semanas que transcurrieron, el conjunto dirigido por Jorge Almirón pasó por diferentes estados de ánimo. Desde la expectativa que genera el comienzo de un campeonato con un equipo renovado y al cual llegaron refuerzos de jerarquía. Pasando por la tranquilidad que produce ganar en Rosario, luego la derrota y posteriores críticas al trabajo y la conducción del entrenador. Y finalizando con la victoria de en Quilmes, que transmite un clima de confianza para recibir a Belgrano el próximo sábado.
Tres semanas de muchos vaivenes vivió Independiente. Por ese motivo, el DT deberá planificar el equipo que mejor observe para el fin de semana.
Al menos en la práctica de esta mañana en Villa Domínico, mantuvo los mismos once que le ganaron al cervecero. Buscará de esta forma, generar confianza a los que viene ganando y aportar competitividad a quienes luchen por un lugar.
Con Francisco Pizzini recuperado y Martín Benítez que pide pista, las dudas se podrían generar en esos puestos. Imagino que mantendrá al ex jugador de Vélez, ya que el juvenil Rojo arrastra una inactividad producto de su lesión.
Y la pregunta que nos hacemos todos, es si le dará una nueva oportunidad a José Valencia. Al colombiano –también es cierto que habrá que darle tiempo y minutos para mostrarse- se lo vio flojo frente al equipo de Julio Falcioni y es mi única duda.
Parece que le va encontrando la vuelta Almirón. Con actuaciones y rendimientos que van de menor a mayor y resultados que se le están dando. El partido del sábado será especial. Porque Independiente debe empezar a ganar de local y generar el clima que acompañe desde las tribunas.