La Copa Maradona arranca en dos semanas y en Independiente se vienen días agitados con los refuerzos, los amistosos y los reclamos a pagar.
El presente futbolístico en Independiente es complicado, y los próximos días serán decisivos de cara al futuro. Faltan dos semanas para el arranque de la Copa Maradona y Julio César Falcioni aún no tiene refuerzos. ¿Cómo es la situación a poco de que empiece el certamen?
En el Rojo cada vez suenan más nombres, pero ninguno se concreta. Se han manejado las posibilidades de futbolistas como Germán Conti, Luciano Lollo, Jorge Rodríguez, Gonzalo Bergessio. Nicolás Blandi y Cristian Erbes, entre otros. El Corcho ya fue descartado, y del resto todavía no hay noticias negativas, pero tampoco hay nada alentador respecto de una posible llegada.
Mientras tanto, la dirigencia juega otro partido. Debe atender los reclamos de América sobre Cecilio Domínguez y Silvio Romero (un millón 700 mil dólares) y de FIFA sobre la puja con Defensor Sporting por Carlos Benavídez (casi 80 mil de la divisa estadounidense). Si bien también estuvo la inhibición por parte de AFA por el caso de Fernando Amorebieta, la Comisión Directiva ya lo tendría solucionado, o al menos eso confirmaron.
Lo cierto es que, mientras el Emperador espera refuerzos de parte de mandatarios que también deben atender deudas, el próximo martes el Rey de Copas jugará un amistoso más que importante con Godoy Cruz. ¿Por qué es relevante? Porque Falcioni sabrá para qué está el plantel, podrá evaluar lo que realmente necesita en base al resultado que se dé con el Tomba.
Si el más grande gana y el examen del entrenador sobre el equipo es positiva, entonces será un alivio que permitirá trabajar con más tranquilidad, de lo contrario los dirigentes tendrán más trabajo de lo normal. A Independiente se le vienen días decisivos, y todas las partes deberán estar a la altura para poder afrontarlos.
