Ariel Holan realizó distintas pruebas pensando en el partido del próximo sábado e incluyó a dos futbolistas en el equipo. El DT meterá mano, respecto al once que jugó en San Juan.
Se acerca el Clásico de Avellaneda y Ariel Holan no quiere dejar ningún detalle librado al azar. Si para un encuentro común el entrenador planea estrategias, mucho más para conseguir la victoria ante el rival de la ciudad. La baja de Pablo Pérez y la rehabilitación de Silvio Romero obligan al DT a hacer cambios y llevar adelante diversos planteos tácticos.
Durante la mañana del miércoles rotó a muchos jugadores y ensayó esquemas. Pasó del conocido 4-2-3-1 al 4-3-3 y finalmente línea de cinco defensores, en un 5-3-2. El inconveniente es que sin Romero, el Profesor prioriza parar como puntas a Cecilio Domínguez – Martín Benítez.
A la hora de defender con cinco, Juan Sánchez Miño entró en la banda izquierda del equipo y corrió al medio a Gastón Silva; aunque luego ingresó Nicolás Figal de central y el uruguayo volvió a su puesto original. Fabricio Bustos, Alan Franco y Guillermo Burdisso respetaron sus posiciones.
En el medio estuvo Nicolás Domingo, rodeado primero de Pablo Hernández y Fernando Gaibor. Posteriormente entró Francisco Silva y parece que de ellos cuatro el entrenador escogerá a tres para que rodeen el círculo central de la cancha.
En definitiva, Holan está sacándose las dudas y dándole ejercicios específicos a todos, para ver cómo reaccionan y cómo se encuentran durante esta semana. Tal es así que hasta Ezequiel Cerutti y Gonzalo Verón fueron usados y pelearán por un lugar en el parado inicial.
