Omar De Felippe en el entrenamiento matutino del jueves probó a un once inicial con dos punteros de área y dos modificaciones más. Una obligatoria,la otra… ¿por rendimiento o táctica?
La falta de ideas, los bajones anímicos y futbolísticos de las individualidades, por momentos una actitud pasiva del equipo y sobre todo la carencia de triunfos, hacen que semana a semana el DT busque variantes. Y, ante Gimnasia de Jujuy tendrá algunas obligadas y otras tácticas.
Comenzando por el regreso de Lucas Villalba por Claudio Morel Rodríguez. El juvenil no tiene la prestancia y experiencia del paraguayo pero gracias a su juventud y su velocidad puede cubrir mejor su sector e inclusive atacar con mayor presencia. Ante la quinta amarilla del ex San Lorenzo, entre otros, De Felippe eligiría al pibe.
La otra variante obligada se da en el puesto del volante central. Aquí es donde De Felippe tendría dudas. Es bien sabido que el partido del domingo es trascendental. Y poner a un pibe, como Franco Bellocq, con pocos partidos en Primera puede jugarle en contra. No obstante, el rendimiento de Reinaldo Alderete fue malo, por lo menos. El DT deberá elegir entre alguno de los mencionados el reeamplazo para Marcelo Vidal que también llegó a la quinta.
Alderete tiene mayor experiencia. Ambos no demostraron aún. Sin embargo De Felippe podría decidirse por Bellocq. La juventud del pibe apoyado en el mediocampo por Federico Mancuello y Martin Zapata puede resultar favorable para el equipo a la hora de contener los arrebatos jujeños.
Sí, no hubo error, Zapata fue otra de las modificaciones que ensayó De Felippe. El volante ocuparía el lugar de Hernán Fredes, quien no tuvo un buen rendimiento ante Sportivo Belgrano. En el costado defensivo es importante Zapata por su despliegue y su casi incansable condición física. Eso sería clave para el volante central. En lo que a ataque se refiere, las imprecisiones del jugador le han quitado la titularidad. ¿Tendrá la chance?
Por último, Omar pateó el tablero, sacó a Matías Pisano y mandó a Facundo Parra junto a Adrián Fernández y, obviamente, Daniel Montenegro. Sí señores, Independiente puede llegar a jugar con dos delanteros de arranque en Jujuy. Claro está que habrá que esperar la confirmación, pero así lo paró el DT.
Seguramente, Omar De Felippe por eso sacó a Fredes que no tiene todo el despliegue ni siente la marca como Martín Zapata. ¿Por qué? Sencillo. Bellocq o Alderete no tienen el nivel de Marcelo Vidal (ni siquiera el actual, que es más bajo que el de la primera ronda) y con Zapata y Mancuello tendrán esa rueda de auxilio necesaria para poder contener el mediocampo.
Arriba, los dos delanteros le permitirá tener más juego en el área, uno de los mayores déficit de este equipo de De Felippe. De concretarse, Independiente volvería al tradicional 4-3-1-2 y Pisano e Insúa tendrían que conformarse con ser alternativa. De todos modos, recordemos que hasta hace poco, el DT amagó con poner dos delanteros y terminó colocando un planteo más defensivo que lo terminó llevando a la derrota. Habrá que estar atentos, pero parece que todo puede cambiar.
