El árbitro dirigió en 11 ocasiones a Independiente desde el Apertura 2004 hasta la actualidad. El Rojo festejó en cinco oportunidades, en tres obtuvo un punto y en otras tantas se quedó sin nada. El más recordado, el último, con la expulsión del Rolfi en la Bombonera.
Si de Pablo Lunati hablamos, hay que señalar su particular manera de dirigir, sus extremos ademanes y su rigurosidad ante el diálogo con los futbolistas. Sus gestos ampulosos, su peculiar movimiento al correr y, por momentos, mediático desenvolvimiento en el terreno de juego lo convierten en un árbitro fácil de identificar y muy recordado por los hinchas.
Con él vestido de negro (sólo una forma de decir, ya que suele vestir otras casacas) el Rojo supo quedarse con más victorias que derrotas. Fueron cuatro los equipos que cayeron ante Independiente dirigiendo Lunati: Huracán de Tres Arroyos 4-0; Gimnasia y Esgrima La Plata 2-0 y 3-1; Quilmes, también 3-1 y Gimnasia y Esgrima de Jujuy 2-1 (estos dos últimos en condición de visitante)
A su vez, en tres oportunidades el resultado final fue 1-1: Newell´s (como local), River (en el Monumental) y Boca (en la Bombonera). Mientras tanto, los otros tres partidos fueron derrotas: en Rosario 2-0 ante Newell´s, en la Doble Visera 2-0 frente a Arsenal y 3-1 en el Cilindro de Avellaneda ante Boca. Quizás esta última fue la más dolorosa, ya que tuvo como estocada final el gol de Martín Palermo desde mitad de cancha.
En el empate 1-1 ante Boca, el 14 de septiembre de 2008 (hace poco más de un año) fue el último encuentro que Lunati dirigió al Rojo. En esa oportunidad, Independiente lo tenía a mal traer a Boca en la Bombonera. El juez de línea no había convalidado un gol de Leonel Núñez (el telebeam retocado dijo que no había entrado toda la pelota, cuando en realidad sí había sucedido) en el primer tiempo.
Más tarde y con el resultado 1-1 Lunati terminó la obra de arte. Lo expulsó por doble amonestación al Rolfi (aunque en realidad todavía no se sabe el porqué) y eso desencajó al conjunto del “Bichi” Borghi que había hecho un gran partido. Los nervios de los 10 en cancha se fueron multiplicando y fue el uruguayo Rodríguez a quien más se le soltó la cadena y agredió al juez de línea. Resultado final 1-1, pero … ¿la herida cerró?
