La dirigencia arregló un plan de pago en dólares para levantar la última inhibición, de cual deberá ocuparse la próxima comisión.
Joaquín Laso todavía no fue habilitado para vestir la camiseta de Independiente porque el Rojo aún no pudo levantar la última inhibición de manera oficial. Para eso tiene que esperar a que Torino quite la demanda en FIFA, asegurando el acuerdo que se firmará en las próximas horas.
La dirigencia ya había enviado 1 millón de dólares a Italia, pero le faltaban 800 mil más para terminar de cancelar la deuda correspondiente a la transferencia de Gastón Silva en 2017.
Este sábado se acordó un plan de pagos por esos 800 mil dólares: pasarán a ser dos cuotas de 500 mil dólares (se suman intereses) a pagar en octubre de 2021 y en febrero de 2022 -es decir, la próxima comisión directiva que asuma en diciembre deberá hacerse cargo de la deuda-.
Pasando en limpio, Independiente terminará pagando dos millones de dólares. Ahora tiene que cruzar los papeles, que se rubrique esta resolución y esperar a que Torino levante la inhibición para que el Rojo pueda incorporar en este mercado de pases.
