Independiente se igualó 1-1 ante Tigre en un muy buen primer tiempo de los de Domínguez que se replicó en varios pasajes del complemento pero quedó en nada
Independiente se medía ante Tigre en la fecha 9 de la Copa de la Liga Profesional de Fútbol, en la que los de Eduardo Domínguez debían ganar para acercarse al pelotón de los cuatro de arriba, que clasifican a la fase final del torneo. Para el cruce en Avellaneda el entrenador seleccionó a: Sebastián Sosa, Gonzalo Asís, Juan Manuel Insaurralde, Sergio Barreto, Lucas Rodríguez; Domingo Blanco, Lucas Romero, Carlos Benavidez; Gastón Togni, Leandro Benegas, Andrés Roa.
Los primeros 15 minutos comenzaron entretenidos, con un Independiente que buscaba hacerse patrón del juego controlando la pelota, y buscando por los laterales hacer daño, con Batallini y Roa siendo su carta más interesante, mientras que Benegas se mostró como opción constante. En el minuto 18 un gran tiro libre de Lucas Rodríguez fue sacado con la punta de los dedos por Marinelli y el palo, cuando la pelota entraba en su segundo palo.
En los minutos subsiguientes el equipo se quedaría un poco, pero en los 10 minutos finales aprovecharía, los de Domínguez tuvieron una chance clara. Contra bien elaborada, Roa de primera toca para Lucas Romero que por izquierda se lanzó al ataque, llegó al fondo y tiro el pase atrás, con un Domingo Banco que pateó al arco y vino un penal para el Rojo, Benegas se hizo cargo, ejecutó con frialdad y convirtió el 1-0 de un primer tiempo que se iba con nuevas advertencias para ampliar el marcador.
En el complemento Independiente arrancó sin poder arrollar al rival y este controlando las acciones, una pelota parada que terminó en el fondo de la red podía ampliar el marcador y cambiar todo, pero esta fue invalidada por el juez de línea. Posteriormente mucho nervio y poca elaboración de juego, concretando más que nada contras que no pudieron terminarse, con Batallini siendo el puntal en ese aspecto.
Ya desde los 25 minutos del complemento el equipo tuvo unos minutos muy buenos, donde volvió a encontrarse con lo que buscaba y pudo arrinconar a Tigre, pero no pudiendo efectivizar aquellas buenas jugadas que generó. Por su parte, mostró buenas sociedades, cuidando la pelota y haciéndose largo ante el visitante, de esa forma, llegando increíblemente en la última jugada una mano que le daba el penal sobre la hora al visitante, el cual establecía el 1-1 definitivo, en un equipo que hizo bien las cosas.
