Las claves del ciclo Tevez, que llegó con un equipo que naufragaba en el fondo de la tabla y que ahora se ilusiona con ser campeón.
La llegada de Carlos Tevez a Independiente fue un antes y un después en el 2023 del Rojo. Aunque en su llegada fue mirado de reojo, el Apache logró convencer a los jugadores de su idea, entusiasmar a la gente en la tribuna y, por sobre todas las cosas, dejar de mirar la tabla descenso para empezar a ilusionarse con la posibilidad de ser campeón.
“El que no se tira de cabeza, conmigo no va a jugar”, fue la frase que enunció en su presentación como entrenador del club. Desde ese momento, Carlitos se dedicó a trabajar de manera ardua en los entrenamientos, ayudó a que muchos futbolistas puedan recuperar la confianza perdida y convirtió a Independiente en un equipo dinámico, con carácter y muy versátil.
Uno de los principales bastiones de su ciclo es que pudo recuperar a muchos jugadores que eran mirados de reojo. Joaquín Laso, Damián Pérez e Iván Marcone son los casos más emblemáticos. Y la apuesta le salió tan bien que hoy en día son jugadores fundamentales a la hora de armar el once inicial. A su vez, futbolistas como Matías Giménez, Lucas González y Brian Martínez comenzaron a mostrar su potencial y empezaron a generar soluciones al equipo dentro de la cancha.
Una insignia del Apache es que logró mucha versatilidad a la hora de diagramar los partidos. El equipo utilizó distintos parados tácticos: 4-4-2, 4-3-1-2, 4-3-3 y 5-3-2. Pero más allá del esquema, lo que es un factor determinante es la actitud adoptada. El esfuerzo, la entrega y el sacrificio de los jugadores vino acompañado de buen fútbol, frescura ofensiva y una mentalidad que tiene entre ceja y ceja el arco rival en todo momento.
Para colmo, la promoción de algunos juveniles es una cuestión que comienza a ilusionar. David “Tata” Martínez y Javier Ruiz son los primeros chicos que hizo debutar Tevez y los que ya empiezan a sacarle una sonrisa a los hinchas por su atrevimiento y compostura. Sin embargo, se espera que sean muchos más los jugadores de inferiores que puedan tener minutos y que lleguen preparados a Primera.
Todo esto generó una competencia interna clave para que la vara se eleve cada vez más y que los resultados comiencen a aparecer. Es que Tevez tiene a Independiente como puntero de la zona A de la Copa de la Liga con 18 puntos, producto de cinco victorias y tres empates. De esta manera, el Rojo pasó de mirar la tabla de abajo (tras los malos pasos de Stillitano y Zielinski) para ilusionarse con poder ser campeón.