Ante Central, Nicolás Figal cumplió una buena actuación y se destacó haciendo la banda, recuperando, anticipando y hasta siendo punzante en ataque.
Gabriel Milito decidió volver a la línea de cuatro y volcar definitivamente a Figal hacia la derecha. El defensor respondió con buen nivel y fue de los más destacados dentro de un equipo que encontró funcionamiento, en líneas generales. Estuvo rápido para hacer la banda, tuvo mucha interacción con la pelota, fue criterioso para pasar el balón y hasta se animó en ataque.
Quizás al ex Olimpo le faltó complementarse más con Emiliano Rigoni y generar una sociedad por la derecha. También falló en algunos cambios de frente. En el primer tiempo sacó un muy buen remate que pasó a centímetros del arco de Sosa y además una apilada que luego derivó en otra acción de peligro.
A partir de la expulsión de Víctor Cuesta, lo más probable es que ante San Lorenzo regrese al medio de la zaga y acompañe a Hernán Pellerano. El chico surgido en las inferiores del Rojo le está dando herramientas al DT y es uno de los mayores aciertos de Milito.