Damián Martínez no había tenido un buen nivel en el partido de Copa Argentina y contra Quilmes hundió más su rendimiento. Hasta ahora, el lateral que llegó para pelear el puesto con Gustavo Toledo, no pudo demostrar con actuaciones por qué llegó al Rojo.
El ex jugador de Defensa y Justicia no encontró el rumbo en el partido por la tercera fecha, estuvo muy impreciso y cometió muchas faltas. En el transcurso del encuentro realizó 31 pases correctos, ocho incorrectos, tres recuperaciones y cometió un total de seis infracciones. Cerró así una noche insatisfactoria.
Martínez reemplazó a Toledo quien el miércoles no podrá jugar el partido de ida por la Copa Sudamericana, ya que fue expulsado contra Lanús. Pero con el desempeño que tuvo contra Quilmes comienzan las dudas sobre su participación ante Chapecoense. Habrá que esperar si la decisión del DT es ponerlo a él o a Nicolás Figal quien supo desempeñarse en ese puesto anteriormente.
