Si bien hubo varios puntos bajos en Independiente, los tres de arriba de Independiente tuvieron una floja noche y el equipo lo sintió: no hubo siquiera una chance neta de gol en todo el partido para el Rojo.
Andrés Silvera casi no participó del juego. Bajó pocos balones aéreos, las pocas pelotas que tocó por abajo las perdió y así se fue sustituido en el complemento por Leonel Núñez.
Facundo Parra fue más de lo mismo: correr, correr y chocar. El héroe de la final ante Goiás no desequilibró en toda la noche ni obligó al fondo del Bicho, aunque Antonio Mohamed igual lo mantuvo en cancha hasta el final.
Lo de Matías Defederico fue en cuentagotas, poco para lo que puede hacer un jugador de su clase. Algunas fintas, muy lejos del arco, y lagunas eternas que hicieron que saliera por Patito en el complemento.
Si bien el medio tampoco les generó juego para que los tres pudieran hacer algo, así Independiente sólo inquietó a Nicolás Navarro con un disparo lejano de Hernán Fredes.
