Independiente rompió la racha y goleó 3-0 a Colón en Santa Fe.
Independiente debía visitar a Colón en Santa Fe con la obligación de conseguir tres puntos que le permitan respirar. Con Juan José Serrizuela en el banco y a la espera de Julio Falcioni, el Rojo fue mucho para un rival que nunca supo encontrarle la vuelta, y eso que el Diablo venía mal.
De arranque, el Rey de Copas mostró sus intenciones. No se preocupó por no tener la pelota, sino que intentó aprovechar las veces que la consiguió, y así pudo lastimar al Sabalero. De hecho, a los diez minutos, rompió el empate: Luego de un excelente pase de Leandro Fernández, Damián Batallini definió y venció a Ignacio Chicco.
Pero esto no fue todo. Colón siguió teniendo la pelota, así como Independiente continuó buscando el arco rival, sin miedo a la pérdida del balón. Finalizando el primer tiempo, entonces, pudo liquidar el cotejo: Luego de un cabezazo tras un tiro libre, la pelota le quedó a Fernández, quien definió y estampó el 2-0. Si, el experimentado delantero cerraba el primer tiempo con una asistencia y un gol.
La segunda mitad, por su parte, fue más de lo mismo, aunque con más facilidades. Apostado al ataque por obvias razones, el Sabalero se descuidó atrás, y el Rojo se dispuso a buscar los espacios para aumentar la diferencia. Entonces, llegó la goleada: Después de un córner, Paolo Goltz cabeceó de forma defectuosa, y Leandro Benegas puso el 3-0. Luego de una revisión en el VAR, Fernando Espinoza convalidó lo que antes había sido anulado.
De ahí en adelante, fue un show de Independiente. Con el local desesperado, el Rey de Copas se floreó, y jugó a los toques como hacía rato no sucedía. Una vez que Fernando Espinoza pitó el final, todo fue alegría del lado del Diablo. Era vital conseguir un triunfo después de tantos partidos, pero más importante era lograrlo de esta forma, con contundencia y una goleada merecida. Ahora se viene River. ¡A seguir así, Rojo!
