En el apuro por generar recursos para tapar baches, Independiente le solicitó un adelanto al Inter de Miami y perdió dinero.
La economía de Independiente pende de un hilo desde antes de que los jugadores realicen un reclamo por vía legal. Las deudas no son sólo con los futbolistas más grandes del plantel (los más chicos y empleados de planta al día) sino también con muchos clubes y/o exjugadores; incluso varios recurrieron a la FIFA para cobrar su dinero.
Ante todo este panorama, la comisión directiva le expresó a los referentes del plantel, mediante Jorge Damiani y Héctor Maldonado, que un ingreso de dólares por la venta de Nicolás Figal aplacaría los inconvenientes financieros a corto plazo.
La polémica surgió cuando De la Cuna al Infierno informó que la venta del defensor al Inter de Miami finalmente se cotizó en 2.5 millones de dólares por el 50% y no 3 millones como se había dicho. No sólo eso, la franquicia de la MLS iba a realizar cinco cuotas de 500 mil dólares extendidas hasta 2023 (la primera ya fue realizada), echando por tierra la versión oficial del “pago en efectivo” que supuestamente iba a hacer el equipo de David Beckham.
¿En dónde está el problema? Ante la necesidad de generar recursos velozmente, desde Avellaneda llamaron a Miami solicitando que envíen todo el dinero junto y no en cuotas. Por lo tanto, desde el Inter contraofertaron y no depositarán los 2 millones en cuatro cuotas, sino que pagarán 1.6 millones en un solo pago. Es decir, Independiente ganará en tiempo, pero perderá 400 mil dólares.
