Independiente le ganó 1-0 a Olimpia en el partido de ida por los octavos de final de la Copa Sudamericana. El gol lo marcó Juan Manuel Trejo en el cierre del primer tiempo. Méndez se fue expulsado infantilmente a diez minutos del cierre.
Fue un partido muy intenso. Ambos equipos ejercían una presión muy fuerte en la salida rival y cuando tenían la pelota en sus pies hacían su negocio. Independiente por su lado quería crecer en el campo a puro toque, mientras que Olimpia intentaba lo mismo pero logrando salir rápido de contra para agarrar mal parado al rival.
Así fue que por ser dueño de casa el que tenía la responsabilidad era el Rojo. Y allá fue. Chocó al principio con su propia imprecisión y luego con la mala fortuna. A los 8 minutos lo tuvo Diego Vera, pero le pifió al balón. Uno más tarde fue Martín Benítez el que probó de lejos y pasó cerca. Y, así, de a poco, los dirigidos por Mauricio Pellegrino comenzaban a golpear las puertas.
A los 21 se dio la primera chance neta de gol. Tiro de esquina, cabezazo, rebote y la pelota que cae en los pies de Víctor Cuesta que le da directo, pero su remate se estrelló contra el palo. A partir de ahí se vio lo mejor del local, aunque de contra Olimpia quería dañar.
Recién a los 38 del primer tiempo hubo otra jugada similar. Desbordó Gustavo Toledo y envió centro genial que Vera conectó para el gol, aunque otra vez fue el palo el que impidió la conquista. Parecía que no iba a caer hasta que 5 minutos más tarde se logró.
Diego Rodríguez cortó un centro y sacó rápidamente para Vera que forcejeó en lo alto con un rival y bajó la pelota para la llegada de Benítez. Éste la dominó, encaró y como wing le metió pase gol a Juan Manuel Trejo para que finalizara la gran jugada con un toque propio. Y así fue. Independiente a los 43 minutos abrió el marcador y al final el resultado.
Ya en el complemento, la intensidad se bajó. Esta vez el que casi rompe el palo fue Zeballos de Olimpia, quien conectó un gran centro del uruguayo Salgueiro. El Ruso estaba vencido. Iban 12 minutos de la etapa final y ahí pareció que Olimpia se animó.
Lo cierto es que ambos entrenadores metieron mano en sus equipos. Y si bien no variaron en mucho el dibujo táctico, hubo más dinámica. Olimpia llegó más en el complemento, pero Independiente no se quedó atrás y tuvo chances de ampliar la ventaja.
Así llegaron al cierre del encuentro. Claro está que Independiente terminó sufriendo con 10 hombres por la expulsión de Jesús Méndez y porque el Decano intento hasta el final para igualar el partido, pero no lo logró y el Rojo viajará a Paraguay con una diferencia escueta, mínima y corta, pero con la satisfacción de la valla invicta y la victoria.
