Rodrigo Gómez llegó al Rojo desde Argentinos Juniors y ese mismo fin de semana saltó a la cancha. Su rendimiento no fue el esperado y quiere revancha. ¿La podrá tener? Depende de Almirón.
Su llegada generó expectativas, porque había sido uno de los pocos jugadores que habían mostrado algo distinto en el torneo anterior, pese a haber estado en Argentinos Juniors, equipo que perdió la categoría.
Además, su juego ofensivo invitaba a imaginar crecimiento con los valores de Independiente. Sin embargo, fue poca la adaptación que tuvo Droopy, ya que ni bien llegó salió como titular en aquel extraño encuentro ante Estudiantes en La Plata. El Rojo llegaba de una goleada con buen fútbol ante Atlético Rafaela y Almirón había decidido cambiar todo. Uno de los que ingresó fue Gómez.
El rendimiento del equipo, más allá de la derrota por la mínima, fue muy pobre y obligó a cambios. Gómez que recién ingresaba en el equipo tuvo un par de oportunidades más. Aunque un poco acotadas. Ante Vélez y ante Olimpo salió reemplazado por Matías Pisano en el entretiempo.
Evidentemente Almirón pensaba una cosa y el futbolista no interpretaba bien el mensaje. Ante Racing jugó todo el partido, quizás porque el cambio obligado de Escudero y la necesidad de aguantar las embestidas del rival obligaron al DT a mantener gente joven para el ataque y para la recuperación. Lo cierto es que sólo ante el Pincha y la Academia, pudo completar los 90.
Vale aclarar que Rodrigo Gómez ingresó desde un principio intentar cubrir el tándem Zárate-Pisano y así hacerle un hueco a Daniel Montenegro en el equipo. Y no pudo nunca cumplir la doble función. Evidentemente a Droopy le costó siempre adaptarse a la obligación de volver.
Ante Banfield también fue titular, pero en su reemplazo, en el entretiempo, fue Francisco Pizzini y ahí comenzó a perder terreno. Mejor dicho, lo perdió completamente, porque recién volvió a estar en el banco de suplentes ante Arsenal y no ingresó.
Inclusive, Almirón ni lo tuvo en cuenta para el último encuentro en Córdoba. Esto presagia un futuro complicado para Rodrigo Gómez que tiene un contrato largo con Independiente. Ojalá que se pueda adaptar al estilo y la idea del DT y se quede. El plantel en su sector es más que corto y con un período más normal de adaptación seguramente podrá estar a la altura. Tiene con qué, pero tiene que demostrarlo. Hoy, está en deuda.
