Independiente fue vapuleado por un Vélez al que le salió todo. El equipo de Almirón otra vez tuvo una actuación llena de dudas y su rival aprovechó. Pratto, la figura del partido, marcó dos goles. El tercero fue olímpico.
Independiente y Vélez dibujaron un primer tiempo bastante parejo. El local tuvo más la pelota pero no supo bien qué hacer con ella. El visitante, por su lado, contó con opciones producto de un ataque con mayores espacios. Y si bien ambos tuvieron su momento, ninguno de los dos pudo sacar ventaja en el marcador.
Las primeras fueron para el Rojo en los pies de Federico Mancuello. En una encaró, se generó su lugar pero su remate su fue ancho. Acto siguiente fue un zurdazo de lejos bien contenido por Sosa. Minutos más tarde, a los 13 exactamente, casi abre el marcador Independiente. Tiro de esquina de Mancu, cabezazo en el primer palo y Claudio Riaño no llegó a conectar debajo del arco. Ese era el instante del local, pero no pudo dañar en la red velezana.
A partir de los 20 minutos comenzó a aparecer Lucas Pratto. Ahí Vélez fue más y dañó. La primera, a los 28, en los pies de Roberto Nanni que se metió en el área y sacó un zurdazo rasante que gracias a la estirada de Diego Rodríguez no terminó dentro del arco. Tan sólo 6 más tarde, fue Rolón el que le ganó la espalda a Cuesta y al enfrentar al Ruso remató ancho. Sobre el final, también cabeceó ancho. Rolón supo sacarse la marca del ex Arsenal pero no fue contundente.
Lucero, en la única que tuvo, no pudo cabecear limpio y se perdió su posibilidad tras un buen centro del Droopy Gómez. Así se fue el primer tiempo, sin goles, con dos equipos que tuvieron su momento y no pudieron marcarlo en el resultado. Lo peor estaba por venir.
El segundo tiempo arrancó con dos cambios en Independiente. Pizzini y Pisano ingresaron por Gómez y Daniel Montenegro. Jorge Almirón quiso darle otro ritmo a los ataques del Rojo, pero perdió algo de presencia en el medio campo y ahí ganó Vélez. A los dos minutos, un error de la defensa le permitió a Lucas Pratto quedar mano a mano con el Ruso y con una gran definición marcó la primera diferencia.
Independiente salió a buscar el empate, pero sin ideas. Méndez no cumplió su función, Pisano no se hizo dueño del equipo, Pizzini quedó muy relegado al sector izquierdo del ataque y Riaño y Lucero no recibieron juego. Es más, el ex Defensa y Justicia está en un nivel muy bajo y si bien le hicieron falta, él perdió la pelota que terminó en la contra letal para que Pratto corra solo, sin marca, 50 metros y ante la salida del Ruso pusiera el 2-0.
Una diferencia larga que sólo desató la locura en el conjunto local y permitió la goleada. Rodríguez había tapado dos pelotas claves, pero el 3-0 fue todo de él. Rolón lanzó el tiro de esquina al primer palo y, el Ruso mal parado, no pudo detener el remate y terminó dentro del arco. El cuarto llegó en otra contra, en la que Romero le ganó trabando a dos defensores de Independiente y definió rasante.
La goleada 4-0 es un golpe muy duro a la ilusión del hincha. Vélez fue un equipo corto, prolijo y que aprovechó las chances. Le salieron todas. Cubero debió irse expulsado cuando el encuentro estaba 1-0, pero Vigliano le dejó una vida más. Lo cierto es que Independiente no jugó a nada otra vez, los cambios realizados tras el triunfo ante Rafaela siguen sin funcionar y Almirón está en la mira del hincha. Sin dudas habrá que encontrar el rumbo. El Rojo lo necesita ya.
