Tras un primer tiempo desastroso y un complemento en el que no ligó, Independiente perdió 1-0 con San Lorenzo en el Libertadores de América y parece haberse desinflado un poco más. Nélson Benítez, a los 8 minutos, marcó el único gol del encuentro. Si Argentinos y Godoy Cruz ganan, lo pasan.
Luego de la derrota ante Gimnasia, en el Bosque, era imperioso para el Rojo levantarse en su estadio ante un rival que venía arrastrándose en el fondo de la tabla. Sin embargo, el equipo del Tolo exhibió mucho nerviosismo, pocas ideas y entregó una derrota que golpea.
El primer tiempo de Independiente fue pobrísimo. Sin juego, sin ideas, carente totalmente de fútbol, el equipo de Américo Gallego no generó nada en lo primeros 45 minutos y, pese a haber tenido más tiempo el balón, fue dominado por un San Lorenzo modesto pero eficaz.
El visitante arrancó más metido y pronto se puso en ventaja. A los 8, Lucas Mareque quiso controlar un balón intrascendente y se le fue al corner, con tanta mala fortuna que su jugada derivó en el gol. Centro, Nélson Benítez le ganó el salto a Darío Gandín y nada que hacer para Adrián Gabbarini. 1-0 y sorpresa en el Libertadores.
Con el gol, San Lorenzo se retrasó en el campo y se paró bien cerquita del arco de Pablo Migliore. El Rojo, por su parte, siguió controlando el balón pero nunca supo qué hacer con él. Sergio Vittor no fue conductor, Leonel Núñez y Darío Gandín casi no la tocaron y los carrileros, Hernán Fredes y Federico Mancuello, sólo aportaron confusión.
El Ciclón recién volvió a inquietar a los 17 con una contra que Emiliano Alfaro terminó mal. Casi nada. Pero lo de Independiente fue peor, ya que siendo local y líder absoluto del campeonato, pateó al arco sólo una vez, por medio de Núñez, recién a los 21. El remate, débil, fue contenido sin problemas por el arquero cuervo.
En el complemento la historia fue distinta. De arranque, el Tolo sacó a Fredes y Mancuello, de pobrísima labor, y mandó al campo a Patricio Rodríguez e Ignacio Piatti, quien le cambió la cara al equipo. Al toque, Nacho desbordó y tiró un centro que Gandín no llegó a conectar.
Hasta los 15 minutos el ciclón fue Independiente, que arrolló a su rival a puro empuje y estuvo muy cerca de convertir, pero no pudo. A los 9, Lucas Mareque armó una buena jugada y habilitó a Silvera, quien la quiso colocar y encontró una buena respuesta de Migliore, que sin embargo dio rebote. Gandín, otra vez, lo desperdició.
Un minuto después, a Núñez por fin le quedó el balón de frente al arco y sacó su remate, pero la pelota se fue apenas desviada. Luego, también se animó Mareque con una de sus habituales subidas, mas el balón nuevamente se fue por encima del travesaño.
El Rojo hizo el gasto y no logró la igualdad, algo que se vislumbraba clave, y con el correr de los minutos fue bajando la intensidad en su juego. Así, empezó a regalarse atrás y casi lo liquida el Ciclón de contra, primero con Salvador Reynoso y luego con Fabián Bordagaray, pero el travesaño primero y Gabbarini luego lo evitaron.
Sobre el cierre, Independiente tuvo su última y mejor chance: un defensor de San Lorenzo cerró mal y Núñez quedó mano a mano con Migliore, pero el delantero rojo definió mal, al cuerpo del arquero, y la pelota se fue al corner. No quedó tiempo para más, sólo para la actuación del ex portero de Racing.
Fue otra vez derrota, la segunda seguida, la tercera del campeonato, que pone en riesgo el liderazgo de Independiente por primera vez desde que lo tomó. Pero más allá de los fríos números en sí, los dos golpes asestados por Gimnasia y San Lorenzo parecen letales. El tiempo lo dirá…
