Los mismos dirigentes que lo contrataron no lo dejaron tomar la decisión sobre el DT. En breve comunicará que no seguirá en el cargo.
El 12 de marzo, días previos a la cuarentena obligatoria en Argentina, Jorge Burruchaga fue convocado por Hugo Moyano para asumir como Manager de Independiente. Sin proyecto y sin convicción más que ayudar al club, tomó un puesto que los propios dirigentes habían desechado cientos de veces.
Fue ídolo como jugador, campeón de todas las competencias, pero no duró ni un año en la Secretaría Técnica de Independiente. 9 meses después fue corrido de la decisión sobre la continuidad de Lucas Pusineri -dejando claro que él no quería la renovación- y esa fue la gota que rebalsó el vaso.
“Voy a trabajar en conjunto con los directivos, pero las decisiones las voy a tomar yo. La responsabilidad va a ser mía”, había dicho el campeón del mundo cuando asumió. Y completó: “Hay managers que toman decisiones y otros que sólo son fuente de consulta de la dirigencia. Cuando yo estuve en la Selección charlaba mucho con Claudio Tapia, pero después el que decidía era él. Acá va a ser distinto porque los dirigentes me dieron la posibilidad de dirigir todo”.
Aunque aún se desconoce cuándo será la reunión con los directivos, pero es un hecho que Jorge Burruchaga dejará su cargo en Independiente. El ex mediocampista quiere hablar con Hugo Moyano cara a cara, también con Héctor Maldonado, y exponer los motivos de su salida. Quiso tener preponderancia, pero no lo dejaron actuar ni tomar decisiones. ¿Para qué lo contrataron?
