Un día como hoy pero de 1852, nacía la ciudad de Avellaneda, el hogar de Independiente.
En mayo de 1906, un joven Independiente que recién daba sus primeros pasos se mudaba oficialmente a Avellaneda, hasta el día de hoy su hogar. Antigua, emblemática, y enigmática, la ciudad alberga una historia enorme, tal vez más que el resto de los distritos del conurbano bonaerense.
Hay que remontarse al 7 de abril de 1852, cuando Juan Manuel de Rosas había sido recientemente derrocado y aún faltaba un año para la aprobación de la Constitución Nacional. En ese contexto, se dio origen al partido denominado por aquel entonces como Barracas al Sud, que incluía los terrenos, aparte de Avellaneda, de Lanús, Lomas de Zamora, parte de Quilmes, y la localidad de Adrogué.
Fue el 11 de enero de 1904 cuando, mediante una ley, se le dio el nombre de Avellaneda en honor a Nicolás Avellaneda, ex presidente de Argentina. Casualmente, un año antes se había fundado Racing, y unos meses después comenzó a tomar forma Independiente. Ambos clubes, hasta el día de hoy, protagonizan una de las rivalidades más reconocidas a nivel mundial.
Uno ubicó la sede sobre Mitre al 470, el otro sobre la misma avenida pero al 934. Los estadios se encuentran a solo 300 metros de distancia, y aunque no se quiera, es inevitable dar con la casa del vecino cada vez que se juega de local. Junto con ello, una rivalidad absoluta, tanto que la ciudad se paraliza por completo cada vez que llega el clásico.
Sin embargo, la cercanía es solo geográfica. Con siete Libertadores y dos Intercontinentales de un lado y una de cada una del otro, en 2020 el Senado de la Nación declaró al Partido de Avellaneda como la Capital Nacional del Fútbol.
Avellaneda supo ser, durante gran parte de su historia, uno de los mayores polos industriales del país, y toda la vida albergó una gran pasión por el fútbol. Hoy, 172 años después, volvemos a celebrar el cumpleaños de la ciudad de Independiente.
