Independiente perdió por 3-1 ante Platense y lo más grave ocurrió en la tribuna, cuando la barrabrava actuó con violencia contra el socio.
Este lunes a las 21:30 Independiente se midió ante Platense, por la sexta fecha del torneo doméstico. En un encuentro que volvió a ser una falta de respeto para el socio en el horario y lo mostrado, la vergüenza llegó una vez culminado el partido por un grupo de violentos que solo buscan amedrentar.
El Rey de Copas, el orgullo de Argentina, perdió como local ante Platense y regaló nuevamente prestigio. Cuando el encuentro llegaba a su fin los cuatro sectores del estadio cantaron en contra del presidente del club, solicitando elecciones ya, en ese momento miembros de la barra fueron decididamente a atacar y querer callar a esos socios que se expresaban pacíficamente.
Este sector, que tiene gran afinidad con la comisión directiva de turno, sin cantar las canciones en las que el socio se muestra en desacuerdo o amedrentando a quienes si lo hacen, ejercieron violencia física para en la gente; indiscriminadamente si había hombres, mujeres o niños, en algo más que repudiable y por lo que la dirigencia tendría que expedirse en un comunicado.
Estos violentos que se perpetúan en las tribunas con el discurso de la cultura del aguante y el pertenecer solo usufructuando al club y alejando a la familia de la cancha. La degradación es total en un club que institucionalmente se desangra y esto no es ajeno en lo futbolístico. Dirigentes reaccionen antes de que sea tarde.
