A la mañana había serias diferencias y a la tarde apareció la que quería Liverpool. ¡Mirá!
Realmente es un mercado de locos. Negociaciones que nacen y mueren tres veces en la misma semana. Dinero que falta, dinero que aparece y que vuelve a faltar para que las operaciones se lleven adelante.
Así pasa con Ezequiel Muñoz, Sebastián Sosa y también con Federico Martínez. En la mañana del miércoles, después de un martes muy caldeado, desde Liverpool señalaban que el pase no se hacía porque Independiente modificaba las condiciones y desde el Rojo respondían que los uruguayos querían todas a su favor.
Hubo un llamado del Manager a un dirigente de peso y la negociación cambió radicalmente por la tarde. La comisión directiva adelantaría 300 mil dólares y luego compraría el 50% de la ficha del extremo charrúa en 1,35 millones de dólares.
Si el dinero se deposita el jueves, la institución de Montevideo prometió levantar la demanda en FIFA contra Rosario Central y está todo arreglado para que el Canalla libere el contrato del futbolista.
Es un jugador de Jorge Burruchaga, ya que no significa ninguna prioridad para Lucas Pusineri, que prioriza las llegadas del arquero y el defensor central. El Rojo precisa un lateral izquierdo, un mediocampista central y hasta un 9, pero el Manager insistió llamativamente por Martínez.