¿Cuál es la postura de Lucas Pusineri y sus ayudantes sobre la relación del plantel con la comisión directiva?
Probablemente el tiempo ponga las cosas en su lugar y termine arrastrando el malestar generalizado que se vive internamente en Independiente. La ventaja, en comparación a otros conflictos, es que los futbolistas se están entrenando en sus casas y los dirigentes cumplen su rol desde sus domicilios. Hoy la distancia obligatoria se volvió saludable para el club.
El vínculo entre los principales referentes del equipo y la mesa chica de la dirigencia está quebrado. Hasta antes de las intimaciones el intermediario era Jorge Damiani, secretario Deportivo, pero luego apareció Héctor Maldonado en la escena y fue él quien pasó a dialogar con Silvio Romero, en otro tono. Ni Hugo ni Pablo Moyano tuvieron línea directa. Tampoco intervino el Manager, Jorge Burruchaga. Acusaciones públicas, cartas documento y la influencia de Agremiados produjeron una tensión dañina en la relación.
A todo esto, desde el cuerpo técnico hicieron caso omiso y no hicieron declaraciones al respecto. ¿Por qué? Decidieron quedar al margen, comprendiendo tres cosas: en primer lugar, es un reclamo válido del plantel unidireccionado a la comisión directiva; en segundo lugar, llegaron hace poco y no pueden perder la confianza puertas adentro; y en tercer punto, ¿qué podrían aportar en una pugna ajena?
Lucas Pusineri optó por centrarse en los entrenamientos de cada mañana vía Zoom, imprimir optimismo, fortalecer el ánimo de los deportistas y esperar a que los días pasen y la actividad vuelva a la normalidad. El DT es consciente de que esta no es ni la primera ni la última vez en la que un plantel intime al club pidiendo la cancelación de una deuda salarial.
Por supuesto que también es consciente de que la relación (incluso con la gente) sólo se subsana de una manera: ganando, jugando bien y alcanzando objetivos. Por el momento, el cuerpo técnico sólo cobró el salario correspondiente a enero y, a mediados a abril, les compensaron un pequeño pago de febrero.
¿Qué plantilla quedará luego de junio?, ¿con qué jugadores podrá contar después de este encontronazo? Nadie lo sabe, ni siquiera Pusineri.