El Xeneize quiere a Fabricio Bustos y opera con una vieja deuda que tiene el Rojo.
No es la primera vez que Fabricio Bustos suena en Boca; porque desde Boca lo hacen sonar. Sin oferta formal hasta el momento, desde el Consejo de Fútbol liderado por Juan Román Riquelme hacen trascender mediáticamente el deseo de contar con el Tractor y así conocer la cifra que el Rojo quiere por el jugador.
Ahora, sabiendo que la postura de Independiente y de Bustos es darle prioridad a cualquier opción que llegue desde el exterior, los bosteros sacan a relucir otra de sus herramientas.
Los periodistas que cubren Boca hacen su tarea y deslizan que si no hay acuerdo, el Xeneize elevará un reclamo a FIFA por una vieja deuda que la dirigencia de Avellaneda jamás pagó. Se trata de 660 mil dólares aproximadamente.
Este monto surge de 600 mil dólares adeudados por el pase de Pablo Pérez y cerca de 4 millones de pesos de diferencia de cambio de cuotas anteriores. Además, 1.500.000 de pesos de derechos de formación de Juan Sánchez Miño.
La realidad es que desde el Rey de Copas no tienen interés en venderlo al club de La Ribera, al menos no por migajas. Si Riquelme quiere al lateral derecho, deberá desembolsar entre 3,5 y 4 millones de dólares.
