El esquema utilizado por Gabriel Milito le permitió volcar a Nicolás Figal como lateral derecho y especialmente enlazar a Nicolás Tagliafico por la izquierda. Durante el primer tiempo tuvo sus frutos, pero en la segunda etapa ambos quedaron mayormente en posición de ataque y esto desarmó la defensa por completo.
Duramente la semana se sabía que el 3-5-2, con Tagliafico como mediocampista izquierdo, no duraría demasiados minutos en el partido ante Temperley. El futbolista que está en la mira de Edgardo Bauza no pudo con su genio en durante el primer tiempo se quedó estancado en la defensa, rompiendo la idea inicial del DT.
Ya en la segunda etapa, cuando el Rojo hizo lo que pudo para buscar el partido, Tagliafico se soltó en ataque, pero el inconveniente fue que Figal también lo hizo. Esto desarmó la zaga central y en varias ocasiones Hernán Pellerano y Víctor Cuesta quedaron mano a mano con los delanteros del Gasolero.
Igualmente, la propuesta agradó al cuerpo técnico y analizarán reutilizarla en el próximo cotejo ante Gimnasia de La Plata.