Lucas Romero no está al 100%, pero para el DT es una pieza clave en su equipo.
Lo vieron rengueando y otra vez encendió las alarmas. El cuerpo técnico advirtió que nuevamente Lucas Romero no estaba para seguir en el campo de juego y a los 35′ del primer tiempo ante Argentinos Juniors decidieron sacarlo. Entró Cecilio Domínguez y produjo una rotación considerable: Sebastián Palacios al extremo derecho, Domingo Blanco como interno por la derecha y Pablo Pérez al círculo central.
Días más tarde, los estudios arrojaron que el Perro sufrió un un edema en fibras proximales y posteriores del aductor mayor izquierdo. El mediocampista se entrenó de manera diferenciada lunes, martes, miércoles y probablemente lo exijan el jueves por la mañana en Villa Domínico, al igual que en la activación del viernes en el hotel Ros Tower de Rosario.
Para Sebastián Beccacece es una pieza clave en el funcionamiento. Lo pidió, insistió por él, lo puso en cuanto estuvo habilitado, sacó a Nicolás Domingo para darle la confianza y ahora cree que si está mínimamente para saltar a la cancha, merece ser titular. Lo va a esperar hasta último momento, aunque no esté al 100%. El DT estima que si hay un partido para arriesgar, es este de Copa Argentina ante Lanús.
En caso de que el propio jugador manifieste que no se siente apto o que el cuerpo médico realmente juzgue que no evolucionó de la lesión, ingresará Nicolás Domingo, quien trabajó con los titulares en las últimas prácticas. Alan Soñora y Carlos Benavidez aparecen como opciones lejanas, pero entran en la consideración de Beccacece.
