A pesar de los esfuerzos económicos y de las intenciones de la dirigencia, Independiente no pudo concretar la mayoría de las negociaciones que inició en este libro de pases y a falta de 10 días concluyó su actividad comercial.
Como en cada período de altas y bajas, en Independiente aparecieron muchos apellidos de futbolistas que podían llegar a la institución de Avellaneda. Con más rumores que certezas, la comisión directiva avanzó firmemente por un puñado de jugadores, pero sólo 3 se sumaron al plantel de Gabriel Milito: Llegaron Juan Sánchez Miño y Damián Martínez, además del regreso de Nicolás Figal. Más allá de las reuniones, voluntades y negociaciones, el Rojo se bajó antes del mercado que cierra el 2 de septiembre y pareciera que se quedó con poco.
Junto al arribo del Mariscal como entrenador del Rey de Copas, en mayo crecieron nuevamente las especulaciones con la llegada de Lucas Zelarayán. Tigres de México solicitaba un dinero que era imposible de pagar y tras semanas de intentos, el jugador prefirió quedarse y el Rojo se bajó de la puja. Algo similar pasó con Rubén Botta, quien no terminaba de convencer al DT y por quien el grupo Pachuca pedía un dineral en comparación al nivel del deportista. El ex Inter tampoco se puso la camiseta Roja.
Luego fue el turno de buscar a un arquero y una delegación de directivos viajó a Italia para cerrar a Mariano Andújar, quien dijo que no y prefirió ir a Estudiantes de La Plata. En ese periplo sí arreglaron la llegada de Juan Sánchez Miño, que junto a Damián Martínez son las dos caras nuevas en el Club. Nicolás Figal fue repatriado, tras un arreglo poco claro con Olimpo de Bahía Blanca.
Finalmente, la comisión directiva de Independiente apuntó a Jonathan Schunke y a Pablo Pérez. Por ambos estaban dispuestos a ceder en lo económico y extendieron largos días de transacción, pero los dos jugadores también les dieron vuelta la cara. Un intento en vano por Iván Marcone, otro aislado por Agustín Marchesín, algunos llamados por Fabián Rinaudo y Marcelo Meli, y la lista de contactos informales continúa sin éxito.
Otra historia fue la de las salidas, porque 15 profesionales partieron de Independiente, depurando así una plantilla más que considerable. Pero la falta de concreción enciende las alarmas y siembre la duda sobre la necesidad de un mediador que esté directamente inmerso en el mundo del fútbol. La actual CD realizó grandes aportes al Club, pero aquí mostró un déficit.
“Hemos visto muchos deportistas interesantes pero imposibles desde lo económico. El plantel está cerrado, es éste y sé que no será posible incorporar algún jugador más”, se conformó Milito y de esta manera el Rojo se despidió de un mercado donde pretendió, pero la palabra que abundó fue “no”.
ENCUESTA | En relación a la palabra del DT confirmando que no llegarán más refuerzos ¿Estás conforme con el mercado?
— InfiernoRojo.com (@InfiernoRojo) 22 de agosto de 2016
