¡El Mariscal revivió uno de los clásicos más calientes con su hermano!
“Imagínate que nos matábamos en el fondo de casa, mucho más en un clásico. Éramos rivales y directos porque él era delantero y yo defensor. Teníamos si o si ese contacto, era inevitable. Cada clásico se juega con intensidad. Uno siente que no puede fallar ni perder”, explicó Gabriel Milito en cuanto a cómo eran los duelos con su hermano.
Por su parte, reveló como se vivían las horas previas a un clásico en el seno de la familia Milito: “Nunca fuimos de apostar, siempre nos hemos respetado mucho en el post partido, compartíamos habitación. Hacíamos un pacto de que no teníamos que hablar. La familia en esos partidos quería que empatemos”.
A su vez, el Mariscal recordó en ESPN como fue la jugada donde lo insulta a su hermano: “A Diego no lo escuchaba yo en ese momento, aparte íbamos perdiendo con gol de Diego, yo ya me imaginaba perder el clásico con gol de Diego y él a la noche. Hay un momento que lo pensás. Al ratito viene esa jugada, yo cuando veo que se acerca a Elizondo a pedirle la roja no lo podía creer”.
Y sumó en cuanto a cómo siguió el duelo de hermanos en esa tarde del 2003: “Siguió todo el partido la pelea. Hubo otra jugada que le fui fuerte y le corté los cordones del botín y Diego reclamó y lo amonestan por eso. Terminamos empatando. Tuvimos hasta que compartir la sala del doping y seguimos la discusión ahí que estaban los doctores”, sentenció el Gaby.
