Más angustiado que crítico, Rodrigo Moreira reprochó el accionar del cuerpo técnico al bajarlo a Reserva. “El respeto tiene que estar siempre“, expresó.
A semanas de terminar su vínculo con Independiente, Rodrigo Moreira hizo saber su disconformidad con Ariel Holan y con la comisión directiva: “El DT nos dijo que nos bajaba a Reserva porque no podía entrenarnos como debía, pero que nos iba a ver. Nunca tuvimos chances, desde el día que nos bajó, nunca más hable con él. Me sentía parte de este plantel. Salimos campeones y a los 5 meses me sacaron”.
“Si me preguntan por qué nos bajaron a la Reserva, no entiendo por qué. por ejemplo, hasta el día de hoy siguen faltando defensores para ir al banco”, sumó en Independiente de América.
Además, Chiqui comentó: “Jugar en Reserva no es ninguna deshonra, pero ya la mayoría pasamos los 20 años y tenemos torneos en Primera. Capaz al ser chico piensan que se nos puede manosear, pero no es así. El respeto tiene que estar siempre”.
En cuanto a su ficha, el defensor explicó: “Se me vence el contrato en junio. Me llamaron los dirigentes una vez, pero no tuvimos más charlas. Volví al club porque me pidieron que vuelva. En Tucumán me querían renovar y ahora no veo interés por parte de la dirigencia para renovarme el contrato”.
Por último, Moreira demostró su angustia: “Me da mucha tristeza tener que irme de esta manera. Quiero mucho al club, me formó como persona, me banca el sueldo. Si toca irme, ojalá algún día vuelva. Gracias a Dios, trabajo hay. Pero me hubiese encantado que me llamen del club y haber podido demostrar interés”.