Independiente empató 1-1 con Barracas Central y sigue sin cortar la malaria. ¿Saben que hay que ganar?
Otra vez la misma historia, otra vez un empate. Pasa un partido, Independiente empata, hay enojo, y cuando hay ilusión para la fecha siguiente, otro empate. El Rojo parece trabado en un bucle del que no puede salir, y ahora le volvió a ocurrir contra Barracas Central.
De arranque, los de Avellaneda comenzaron con todo. Decidido a llevarse puesto al rival, los dirigidos por Leandro Stillitano intentaron ser punzantes en ataque, y rápidamente les dio resultado. Luego de un lateral de Ayrton Costa, Matías Giménez ganó para Martín Cauteruccio, quien jugó de primera para Baltasar Barcia. El uruguayo la frenó y, con la derecha, le sacudió violentamente la red a Andrés Desabato.
Sin embargo, la alegría duró muy poco. Otra vez, Independiente pecó de inocente en una pelota parada, y Barracas Central fue quién aprovechó. Un córner, un rechazo, y Facundo Mater le reventó el arco a Rodrigo Rey desde lejos. Si, otra vez, al más grande le empataron desde una pelota parada.
Y como si fuera poco, el Rojo se volvió a complicar solo. Porque si, cuando el equipo gana o empata, tiende a cometer errores insólitos que lo complican más. En una jugada sin peligro, Sergio Barreto le bajó la plancha a Ricardo Centurión, y Fernando Echenique lo expulsó. ¿Qué quiso hacer? Nadie sabe.
Aún con un jugador menos, Independiente estaba en partido. Para el complemento, Leandro Stillitano intentó mejorar la performance con algunos cambios, pero solo entorpeció más el juego de un equipo que no gana hace seis fechas. Al final, no logró cambiar el rumbo para bien, y el equipo terminó empatando otra vez.
El Rojo sigue perdido, sin encontrarle la vuelta a una situación que se hace cada vez más engorrosa. Hay jugadores que no se sabe por qué juegan, y Stillitano intenta con cambios que ni él ni los jugadores entienden. La situación es muy delicada, y la paciencia parece haberse agotado hace tiempo. ¿Hasta cuándo seguirán perdiendo puntos?
