Una lástima que se hayan escapado dos puntos, que nos dejan prácticamente sin objetivos de los deseados, ya que la clasificación a la Copa parece ya demasiado lejana (a 11 puntos de Estudiantes).
Pero quedan de los otros, que no nos competen tanto a los hinchas pero sí al cuerpo técnico y más aún al plantel, que debe demostrarle a Pepé quien está para seguir en el club y vestir su camiseta.
Obviamente hay muchas cosas por corregir. El sábado al equipo le faltó, como en todo el torneo, un mediocampista con ida y vuelta por la izquierda (que no es lo mismo que decir se extrañó a Centurión) y resto físico. Es evidente la falencia en este aspecto y nos trae muchos problemas.
Algunos que no dejan dudas, ya que sin miedo a equivocarnos podemos afirmar que nos metió atrás Argentinos, que había jugado en Brasil 72hs antes, corriendo más que nosotros y que muchos de nuestros jugadores quedaron extenuados.
Y otros en los que se puede polemizar. Porque puedo decir que cuando se mejore físicamente la delantera va a ser beneficiada, que Núñez a su juego, además del lanzamisiles que tiene en la pierna derecha, le va a agregar potencia y va a poder correr más y mejor. También que Montenegro va a recuperar su velocidad y con eso volver a hacer diferencia en el pique corto, todo esto sumado a que el mediocampo va a poder llegar antes y más entero para ayudarlos a lastimar a los rivales, presionar más adelante para que no haya sólo veinte o treinta minutos de dominio rojo por partido y estar más atentos en la vuelta para sumarse a los defensores… Solo el tiempo me dará o no la razón.
Ya se ven mejoras en estos dos partidos. Al equipo se lo ve mucho más solidario. El Toti Ríos nos dio más dinámica y precisión por la banda derecha. Si le suma mas regularidad a su juego va a ser importante para el mediocampo y le va a cerrar la boca a varios (me incluyo). Calello aporta presión y un gran criterio a la hora de recuperar la pelota, algo que faltaba en el mediocampo (¿era tan difícil darse cuenta que tenía que jugar, Bichi?). Si mejora con la pelota en los pies se va a consolidar y va a dejar de ser una promesa para convertirse en nuestro numero cinco.
Si esto último sigue pasando y Pepé los pone a punto físicamente, quizás podamos volver a tener objetivos de los que tanto anhelamos, ojalá sea lo antes posible.
Javier Brizuela para Infiernorojo
