El contrato de Jesús Méndez vence este 31 de diciembre y los dirigentes aseguran que no les atiende el teléfono, aunque también afirman que habló con el entrenador. “Le dijo a Pellegrino que se va a quedar”, dijo Héctor Maldonado.
Jesús Méndez dejará de ser jugador de Independiente, de manera oficial, este 31 de diciembre cuando vence su contrato. Para Mauricio Pellegrino y para los dirigentes es prioritaria su continuidad, pero pese a que en todo momento se mostraron optimistas, la renovación aún no se firmó y no hay una fecha cierta para oficializar el arreglo. Este miércoles, en diálogo con Campanas del Infierno, Héctor Maldonado reconoció algunas dificultades en la negociación: “La verdad que se está haciendo difícil, porque Jesús no nos atiende el teléfono hace varios días”.
Méndez comenzó a trabajar con Uriel Pérez – mismo representante ahora que Federico Mancuello -, pero con una incidencia constante de su padre, que fue quien puso sobre la mesa el principal obstáculo durante la charla de su renovación: el deseo de que se le compre el pase – Méndez firmó libre, por el contrato – en una cifra cercana a los 1.8 millones de dólares. En Avellaneda descartaron de raíz esa posibilidad. “No le vamos a comprar el pase, en esos términos no se queda”, había asegurado el propio Maldonado semanas antes. Claro que las charlas continuaron y en Independiente ofrecieron un contrato extenso, hasta 2018, con una importante mejora en el salario.
“Lo último que se es que Pellegrino lo llamó y Jesús le confirmó que se iba a quedar, eso me enteré hoy”, agregó Maldonado, este jueves. Lo cierto es que, pese a la predisposición mostrada, al menos al principio de las charlas, la continuidad de Méndez aún no está resuelta. Y para el entrenador es vital que se quede.
