Muchos se tomarán a risa las cosas que escribo. Pensarán que a mí la vida me sonríe y que todo es joda.
Pero la vida de cronista ‘part time’ de Racing (no ‘full time’ por razones de salud) tiene sus sinsabores. Sí, porque la academia no solo le depara depresiones a toda su parcialidad, sino que su radio de influencia alcanza a los seres humanos también. Como yo.
Qué difíciles se hicieron mis días con la ida de Lalín, fue como un golpe de redoblante en el corazón. Exorcismos, partidos amistosos por un termotanque en Chile (1), expulsión de los lugares de concentración por falta de pago (2), las carreras de autos (3) y muchísimas cosas más que hicieron de mis días un permanente paraíso.
Pero un día ‘el pelado’ (así le decíamos los que lo estimábamos mucho. Sus detractores lo llamaban de otras maneras) se fue. “¿Y ahora?” Me preguntaba yo…
Pero llegó Marín. Empresario que parecía serio, un tipo grande (de edad) hincha de Racing y que prometía llevar al ex club a lo más alto. Y cumplió… no con llevar a Racing a lo más alto, pero sí con esa ley que parece confirmar que cada uno de los que asume en la academia lo hace para convertirla en el hazmerreir del fútbol local.
Sus bravuconadas para con la barra brava de Racing (4), sus escapadas a ver la Copa Davis mientras la institución se caía a pedazos y demás fueron gestos dignos de un GIGANTE.
Pero un día Marín se fue y asumió De Tomaso. Parecía serio, aunque ya debimos de sospechar lo que se venía: Ni siquiera era hincha de Racing (5). Lo que siguió fue el sumun de lo lisérgico y lo surreal. Ni vale detenerse en ninguno de los hechos que propició en particular porque sería desmerecer una gestión signaba por la excelencia.
Pero De Tomaso también se fue. Y asumió un interventor, García Cuerva… es cierto que no logró ponerse a la altura de sus predecesores, pero también es cierto que no le dieron tiempo.
Y luego vinieron las elecciones y todo parecía volver a la norm… todo parecía mejorar. Pero la academia parece un árbol que ha crecido torcido y, por más atenciones que le pongamos, está torcido y el paso del tiempo solo agrava su situación. La contratación del vendehumo mayor de la Argentina fue el primer paso, pero que parece distar mucho de ser lo peor.
Así es… ahora se hace cargo del plantel Juan Barbas, quien llegó sabiendo que una buena racha podía darle la titularidad como DT. Y así como fueron contados los minutos que duró ese sueño, también lo serán los que dure como interino. La danza de nombres comenzó hace unos días y no dejó de sorprender: Pekerman, Cuper… nombres que sonaban a imposibles.
Pero Racing no sabe de imposibles y fue por más: Marco Van Basten, Luis Felipe Scolari… y Lothar Matthäus.
En algún punto tiene coherencia, claro. Se decía estos días desde la dirigencia que el candidato a suceder el interinato de Barbas no hablaba castellano, o sea, sería un técnico ideal para un plantel que parece no entender ese extraño idioma.
A tono con la mentalidad racinguista, voy a imaginar que el bueno (y quizás demente) Lothar asume como DT, tal como sugieren que podría suceder en el Olé de hoy… reemplazando a Barbas (puesto así, suena fuerte). Pero supongamos que esto sucede, síganme la corriente.
¿Cómo sería su primer práctica?. Imaginemos que Molina lo lleva al entrenamiento, lo presenta, y cuando el germano lo consulte sobre cuál es el ‘9’ del equipo reciba como respuesta un dedo índice señalando a Caballero.. ¿cuál sería su reacción?.
¿Y cuando ese mismo índice señale a Santillo como ‘el arquero’?.
¿Qué se le dirá sobre Adrián Lucero?… ¿la verdad?.
Para alguien acostumbrado a ver cuerpos atléticos y físicos imponentes dentro de un campo de juego… ¿qué impresión le puede causar ver a un jugador que carece de cuello, como Mercado?.
Matthäus seguramente ha visto mucho fútbol del bueno en Europa, él mismo es una leyenda… ¿qué puede llegara a pensar al ver que a Aveldaño le cuesta mantener la pelota dentro de la zona de influencia de la Ley de Gravedad?.
Él mismo como ex volante y defensor ¿qué puede sentir al ver que su espejo dentro de la cancha será un Cáceres, un Yacob?.
¿Cómo tomará el hecho de que solo se pueden realizar dos incorporaciones, en un plantel que tiene menos fútbol que la canciller Angela Merkel?.
¿Cómo evitar que Alemania invada Argentina luego que allá vean jugar a Falcón o Castromán?.
No puedo más que solidarizarme con el ilustre ex jugador alemán. Por él solamente, claro, si es que sabe de todo esto que se habla de él aquí por estos días y no está doblado de risa.
Pero si es por mí, no puedo menos que alegrarme y dormir tranquilamente por las noches. Hay una luz de esperanza.
Gracias a dios soy del Diablo.
Shisus
- (1) Esto es verdad y el termotanque en cuestión fue a parar al lugar donde concentraban los juveniles.
- (2) Dicho por un jugador de Racing en aquellos tiempos “Pasa que estamos una semana en cada lugar concentrando, como nadie paga, en algún momento nos echan y así estamos, se hace todo muy difícil”.
- (3) Un jugador de Racing comentó que se hacían carreras de autos los días de cobro. Como los fondos eran escasos, al momento de recibir los cheques se apuraban a llegar al banco, ya no había plata para todos.
- (4) Marín (con más de 60 años de edad) declaró que la barra de Racing “Se hacen los guapos todos juntos, de a uno arrugan”.
- (5) De Tomaso es hincha de River Plate.
