Sebastián Rambert, quien marcó el gol que le daría a Independiente la Supercopa 1994 nada más y nada menos que ante Boca, recordó con lujo de detalle lo que fue la final ganada.
Iniciando la charla, Rambert recordó lo que fueron esas finales ante Boca y el periplo del Rojo en la copa: “La realidad de esa final contra Boca, Independiente había hecho un gran torneo, eliminando a 3 equipos de Brasil, con lo difícil que es eso. Esa final fue la antítesis de lo que había sucedido en el torneo, sufrimos e Islas terminó en una forma increíble, defendiendo al arco como pocos”.
“En la cancha de Independiente también sufrimos, con muchas situaciones para Boca, con un Islas también impecable. El pase de Gustavo López terminó simplificando lo que nos había costado tanto”, sumó detallando lo que fue el encuentro de vuelta
Luego, ante como se tomaron los días previos al cotejo, Pascualito aseguró: “Nosotros no lo vivimos tanto así, estábamos confiados. Había tenido un gran torneo y no lo pensamos que enfrentábamos a Boca. Lo que si sentíamos es que era la única copa que le faltaba a Independiente en su vitrina, y te lo hacían saber que era la única copa internacional que le faltaba en Sudamérica”.
A la hora de detallar lo que fue su gol que valió la copa, Pascualito esgrimió: “Boca quiere salir jugando por la banda izquierda, por el lado del banco y el cambio que hizo Miguel Brindisi, que cambió a Gustavo López y a Dani Garnero de banda, le termina quedando a Gustavo López toda la cancha de frente. Yo trato de hacer dos pasos para quedar habilitado. Navarro Montoya había quedado mal parado, no podía hacer nada y Gamboa ya estaba lejos”.
En el final, al analizar lo que fueron las virtudes del rival, lanzó: “La situación cambió de golpe, pudimos encontrar la vuelta. Boca intentaba dentro de lo posible presionar mucho y achicaba bien. Menotti era, en ese entonces, de los que reducía espacios”.
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