Tras la derrora en Junin ante Sarmiento, Javier Cantero le comunicó en el vestuario al plantel y al cuerpo técnico que renunciará a su cargo. Fue el presidente el que le dio la noticia a los jugadores y no un pedido del plantel, como se dijo en un primer momento. Se hará oficial durante el transcurso del martes. Omar De Felippe seguirá a cargo del primer equipo.
Llegó el final. Mucho antes de lo que el presidente pretendía, mucho después de lo que la lógica indicaba. Tras una nueva derrota de Independiente y envuelto en una crisis institucional que no supo ni pudo manejar, Javier Cantero le comunicó al plantel y al cuerpo técnico su decisión de dar un paso al costado. La misma se hará efectiva durante el transcurso del martes, posiblemente en una conferencia de prensa.
Lo que resta definir, o en todo caso comunicar, son los pasos a seguir. Estatutariamente no se permite la renuncia de la comisión directiva en pleno, por lo que ante una salida del presidente, ya sea por licencia o por renuncia, el vicepresidente primero debe tomar su lugar: en este caso, le correspondería a Rubén Vázquez.
¿Y la interna en el seno de la CD? Cierto es que entre los miembros – que quedan – de comisión, hay muchísimas diferencias. También se habló en los últimos días de una eventual candidatura para diciembre de Claudio Ciancio, secretario administrativo, hombre que despierta tantos elogios como igual cantidad de rechazos.
Deudas, crisis, mentiras, engaños, un descenso a la B Nacional, un pésimo armado del plantel. Problemas de seguridad en los predios, problemas con los empleados, problemas con los acreedores. Todas cuestiones que Cantero jamás pudo sacar a flote. El presidente dijo basta luego de la derrota en Junin. Cómo su predecesor – a quién denostó, cuestionó y terminó superando su pésima gestión -, se fue demasiado tarde. Y causándole a Independiente un daño enorme.
